A pesar de que se ha visto una disminución en la actividad sísmica en la isla de La Palma, las autoridades han decidido que esta debe mantenerse en situación de alerta y el semáforo volcánico en amarillo debido a que la actividad no se ha detenido, y que tras la ocurrencia de un terremoto de magnitud 3.2 sentido con intensidad III el día sábado a las desde las 03.00 UTC (04.00 en Canarias), se ha intensificado la actividad sísmica, así lo han establecido los expertos del Comité Científico del Pevolca.

El último de estos según el Instituto Geográfico Nacional (IGN) ocurrió el día sábado un en La Palma, a las 23:42 (hora canaria) con una profundidad de 0 km y una magnitud de 2.7 escala de Richter.

Si bien esta actividad sísmica es de baja intensidad, lo que preocupa a los expertos es lo superficiales que son, pues estos terremotos son los más destructivos al tener un impacto más directo con la superficie terrestre.

Existe la probabilidad de hayan sismos de mayor intensidad

Debido a la superficialidad, las autoridades consideran que es probable que ocurran terremotos más intensos que causen daños a los edificios y que se desprendan las varias de rocas. Los expertos han señalado que también existe la posibilidad de que se den otros fenómenos además de las deformaciones, como un cambio en la temperatura, olor y color del agua o un comportamiento extraño en de animales, pues varios de ellos son sensibles a los desastres naturales, por lo que es importante que la población se mantenga atenta y notifique alguna anomalía.

El Pevolca diseño un semáforo volcánico como sistema de alerta a la población, este tiene 4 colores y cada uno corresponde depende del riesgo. Actualmente La Palma continúa el color amarillo, por lo que la población se mantiene constantemente informada a través de los canales oficiales. Por su parte, la vigilancia y monitorización de la actividad volcánica y sísmica es intensificada.

Preparación ante posible actividad volcánica o sísmica

Los residentes de la isla deben conocer las posibles rutas de evacuación y tener alguna vivienda de familiares fuera de las zonas de riesgo para el resguardo.

Además, es ideal tener una mochila con objetos que los miembros de la familia puedan necesitar como móviles para mantenerse comunicados, medicamentos, documentación personal y cargadores.

En caso de ser una persona que tenga la movilidad limitada y necesite ayuda, debe comunicarse con el departamento de Asuntos Sociales de su Ayuntamiento, estos en caso de una evacuación se comunicarán para indicarle que ruta de evacuación tomar y el punto de encuentro para trasladarlo.

En caso de un sismo, si la persona está en su vivienda debe resguardarse debajo de un mueble sólido o el marco de una puerta, lejos de las ventanas.

Si está en el exterior, debe alejarse de los edificios altos, postes de la luz, árboles, vallas publicitarias, etc. Si se encuentra cerca del mar, alejarse de las orillas. Al dejar su hogar, debe desconectar agua, luz y gas.