El fin del estado de alarma se acerca. El próximo 9 de mayo llega el fin del cierre perimetral y el toque de queda. Y las autonomías ya están preparándose para esta nueva realidad. Por lo que ya han comenzado a pedir al Gobierno central que se modifiquen ciertas leyes para que ellos tengan capacidad suficiente y margen para dictar aquellas restricciones que sean necesarios. De esta forma, se podrá evitar un caos jurídico que pinta algo complejo en las próximas semanas.

Instrumentos jurídicos para las autonomías

Desde el Gobierno central ya han vuelto a repetir que el estado de alarma acaba en próximos días y algunas de las autonomías ya han comenzado a tomar decisiones.

Por ejemplo, Cataluña donde han tomado la decisión de aprobar un decreto para continuar con toques de queda o confinamientos si la situación así lo requiere. Aunque, por supuesto, la intención de las comunidades es poder disponer de instrumentos jurídicos que afiancen las restricciones por la covid-19. Algo fundamental para que las decisiones que deban adoptar próximamente, si se diese el caso, no dependan de los tribunales.

Las autonomías piden herramientas suficientes de acción

Con una pandemia aún vigente, las autonomías necesitan contar con las herramientas suficientes para poder prolongar el toque de queda. Una restricción que creen fundamental mientras sigue el ritmo creciente de vacunación.

Pero una restricción que como bien sabemos afecta a los derechos fundamentales. Por ello solicitan de forma encarecida contar con el apoyo del Gobierno central en uno de los momentos más importantes para el fin de la pandemia. Así lo defiende, por ejemplo, el País Vasco, una de las siete comunidades en riesgo extremo que cuentan con una situación extrema entre las UCI al límite y el retraso de operaciones rutinarias.

Por otro lado, desde Castilla-La Mancha, se solicitó al Consejo Interterritorial una mejor explicación o un mejor detalle del margen de maniobra con el que contarán tras el 9 de mayo. Sobre todo, en lo que se refiere de manera "muy evidente" a los derechos fundamentales. Por lo que pidió, la consejera Blanca Fernández, "un marco jurídico que sea solvente y de seguridad".

Teniendo siempre en mente aquellas restricciones que atañen, sobre todo, al cierre perimetral, el toque de queda y las restricciones de reuniones. Tres decisiones que son duras de tomar pero que como demuestran los datos han ayudado al descenso de la incidencia. Este pasado miércoles, las cifras de dosis inoculadas en las últimas 24 horas ascendía a 456.777. Por lo que, según la ministra de Sanidad, Carolina Darias, "debemos estar contentos porque en estos momentos ya se puede confirmar que estamos a más ritmo que el propio virus".