Laura Velasco denunció en sus redes sociales que sufrió acoso por parte de dos hombres mientras viajaba en un tren Intercity de Renfe. El deleznable hecho se produjo cuando estos dos hombres ocuparon el asiento de la joven y cuando ella llegó, tuvo que sentarse enfrente, a la espera de la llegada de algún otro pasajero que la ayude a subsanar la situación y poder sentarse en su propio sitio asignado.

La violencia sufrida por Laura Velasco en primera persona

Según relata Laura Velasco, apenas ella llegó y se ubicó de cara a los dos hombres, comenzó el jaleo y la comenzaron a agredir a través de un vocabulario soez y violento.

Estas dos personas, de unos 25 años, comenzaron a hablar telefónicamente con un tercero utilizando manos libres, con lo cual los agresores eran tres, que se empezaron a referir a su vestimenta, a su cuerpo, a su rostro.

Como si todavía Laura Velazco tuviera que justificarse, aclara en su publicación que su ropa era por demás recatada, ya que vestía “un chaleco de lana con cuello vuelto”, pero aún así aumentaron la presión sobre ella hablando impúdicamente de la “del 213”, el número del asiento que estaba ocupando. Tan brutales son las palabras del tercer interlocutor, que quien tenía el teléfono atinó prontamente a sacar el manos libres y le recriminó diciendo que “vamos, que cuando llegue a Sevilla me detienen por agresión o por alterar el orden público”.

La pésima respuesta del revisor del tren Intercity de Renfe

La joven, ante tal grado de agresividad hacia su persona y con mucho miedo, se dirigió al revisor, quien, para su gran sorpresa, lo único que atinó a hacer es a cambiarla a ella de vagón, mientras los maltratadores continuaban en su sitio: “Los dejan tan alegres en el asiento que yo he pagado y con un simple aviso de que a la próxima los bajan del tren”.

El hecho, que reviste todas las características de violencia de género, deja a la Mujer desguarnecida, como reflexiona Laura al decir que “una vez más la mujer es el problema y a la que hay que apartar”.

Laura Velasco, GH Revolution

El año 2017 fue el último en que el reality ‘Gran Hermano’ hizo su versión llamada ‘Revolution’, donde participaban personas anónimas.

En ese grupo estuvo la andaluza Laura Velasco. Tiempo después, Laura reconoció el error de no haber visibilizado su condición de mujer transexual, lo que le hizo pasar muy malos momentos y discusiones con otros habitantes de la casa de Guadalix.

Todo 8-M, lucha y reivindicación sigue siendo poco mientras las mujeres y otros colectivos sigan viviendo punibles situaciones como la que atravesó Laura Velasco en el desolado compartimiento de un tren, a merced de estos hombres que la vejaron de palabra y la atemorizaron: “una se siente insegura y con miedo de lo que ocurrirá cuando llegue a Sevilla y me cruce con ellos en el andén”.