Con la llegada de las vacunas, el personal médico es quien tiene la prioridad debido a su contacto con los pacientes con COVID-19; sin embargo, esto no significa que no haya irregularidades en el proceso de vacunación, donde personas que no están en este grupo reciban la vacuna.

Este es el caso del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, donde denuncian que hay unos 1.200 sanitarios de primera línea que aún no han sido vacunados pero que sí se les ha administrado la vacuna a unas 600 personas de forma irregular, entre ellos hay curas, trabajadores jubilados y personal de la cafetería del hospital.

Otros, quienes incluso han recibido la segunda dosis, son el gerente del hospital, José Soto, y el director de gestión, Pedro Izquierdo.

El delegado de la sección del Movimiento Asambleario de Trabajadores de la Sanidad (MATS) del Hospital Clínico, Santiago Zarapuz es quien ha denunciado estas irregularidades, donde el gerente se ha saltado el protocolo, vacunando a personal que no pertenece a la primera línea de la respuesta al COVID-19, por lo que ahora no hay vacunas para estos trabajadores. Resaltó que los directores de los hospitales de Bilbao, que al saberse la noticia de que se vacunaron saltándose el protocolo terminaron renunciando a sus respectivos cargos.

Además de los 600 sanitarios jubilados vacunados de forma irregular, hay 5 sacerdotes del hospital, trabajadores del servicio de vending, 19 trabajadores de cafetería de la empresa Mediterránea y 7 vigilantes de seguridad.

Datos de vacunación del hospital

De los 5.936 trabajadores del hospital 3.078, son considerados de primera línea y 1.135 aún no se han vacunado, por lo que alrededor de un 36% de los sanitarios de primera línea no han recibido la vacuna, lo que es preocupante en tanto que, desde que empezó la pandemia, un gran número de sanitarios se ha contagiado, aproximadamente 1.500 trabajadores.

Por su parte, el hospital no se hace responsable de las irregularidades, argumentando que la vacuna es voluntaria y puede que muchos simplemente hayan decidido no aplicársela. Por su parte, Zarapuz niega que esto sea así, poniendo como ejemplo su caso, que a pesar de haber solicitado la vacuna el 15 de enero (es trabajador de la UCI) el 22 de enero, el día en que iba a aplicársela, cancelaron la vacunación.

Sanitarios en primera línea de la sanidad privada están sin vacunar

No solo los trabajadores de este Hospital están quejándose por no recibir las vacunas. El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) pide que se aplique la misma prioridad a los trabajadores de primera línea, ya que corren el mismo riesgo que los sanitarios de la sanidad pública, pero las consejerías de Salud de las comunidades autónomas priorizan la vacunación de los sanitarios públicos frente a los del sector privado.