Una de las grandes dudas que tiene la población española en estos momentos es si van a volver al estado de alarma a la vuelta de sus vacaciones. Ante el agravamiento en las últimas semanas respecto al número de contagios de Coronavirus producidos por este virus y que han producido el cierre de discotecas y locales de ocio nocturno y la prohibición de fumar en los espacios al aire libre. Pues bien, es precisamente la comunidad autónoma de Castilla y León la primera en sopesar una vuelta al estado de alarma en todo su territorio, tal y como ha anunciado el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea.

Pero siempre y cuando se disparen los contagios en los próximos días.

Estado de alarma regional para frenar al coronavirus

¿En qué consistiría este estado de alarma en el territorio de Castilla y León? En primer lugar solo afectaría a las nueve provincias castellanas y leonesas y su aplicación serviría para que desde su ejecutivo se pudiesen decretar confinamientos “selectivos y ágiles” como ha apuntado el vicepresidente Francisco Igea. Debido a que no van a descartar ningún tipo de medidas, por muy impopulares que sean para sus ciudadanos. “Vamos a llevar a cabo las que sean imprescindibles según la evolución que vaya teniendo la nueva oleada del coronavirus”, ha matizado el político castellano.

Confinamiento total durante 15 días

El vicepresidente autonómico ha puesto de manifiesto en sus declaraciones a los medios de comunicación que el “confinamiento total” durante 15 días seria infalible para contener el coronavirus. Pero por otra parte, ha remarcado que no quieren tomar esta decisión tan problemática habiendo otras medidas alternativas para solucionar este grave problema sanitario.

Ante lo cual es necesario que toda la población de la comunidad autonómica se conciencie de lo que se está jugando la región en estos momentos. Con las repercusiones tan negativas sobre la economía de la comunidad autónoma. Una de las más castigadas por el número de contagios y muertes en la primera fase de la pandemia. En especial, la provincia de Segovia como consecuencia de su proximidad con Madrid.

Los perjuicios económicos pueden ser muy importantes si no se acatan las medidas

Ante este escenario, el vicepresidente de la Junta de Castilla y León no ha podido negar ante los medios de prensa que “restringir las reuniones y contactos sociales no se trata de una opción, sino que por el contrario es una obligación muy responsable”. Asimismo ha expresado su opinión de que los perjuicios económicos y sociales serán dentro de poco muy superiores si no se acatan las medidas que se han impuesto en esta zona geográfica. En donde desde este lunes no se puede fumar por las calles y se han limitado los horarios en las terrazas.