La rebelión de la ciudadanía de los barrios ricos de la ciudad de Madrid se sigue extendiendo en contra de la gestión de la crisis del Coronavirus por parte del actual Gobierno. De lo que parecía una revuelta de algunos vecinos del Barrio de Salamanca, ahora las manifestaciones se han extendido hasta las puertas de la sede del Partido Socialista. Incluso desde una azotea donde está instalado un cartel en contra de Sánchez se tiran octavillas con la imagen del líder socialista acompañada por un texto muy contundente. Según varios testigos, estas octavillas fueron lanzadas por un grupo de jóvenes que no llegaban a diez.

Según la versión de los mencionados testigos, un grupo de diez personas jóvenes subieron a la azotea de uno de los edificios que separa el Paseo de La Habana y el Paseo de la Castellana, una de las zonas con mayores ingresos de todo el país.

Los manifestantes niegan la gravedad de la crisis del coronavirus y piensan que la economía debe estar por encima

Cuando empezó a sonar el ruido de las caceroladas, se asomaron y empezaron a extender un enorme cartel que logró cubrir toda la fachada del edificio y destacaba en el paisaje urbano gracias a su color rojo. El rostro del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lucía con una franja de color negro que ensangrentaba y lograba ocultar la mirada del político.

En el rótulo se podía leer: “Un buen Gobierno obedece”, en clara alusión a las solicitudes de algunos ciudadanos de Madrid que prefieren poner por encima sus intereses económicos antes que la salud de la población a pesar de estar viviendo una pandemia global como es el coronavirus.

Madrid continua en fase 0 por su dirección de la crisis del coronavirus

En la calle, cientos de ciudadanos. También una decena de camiones de la Policía Nacional y tres o cuatro vehículos de la Municipal. Los agentes en ningún caso intentaron disolver a la multitud que, ante su presencia, no hizo gesto alguno de volver a sus domicilios (hay que recordar que Madrid sigue en fase 0 dentro de la desescalada del confinamiento).

En todo momento gritaban “¡Libertad!”. De fondo, el himno de España. Todos los presentes estaban muy enardecidos.

En total, veinte minutos de aplausos mientras los jóvenes cubrían la fachada con un cartel enorme gracias a un sistema de poleas. Y, después, regaron a todos los presentes con una gran cantidad de octavillas con el mismo montaje fotográfico basado en el rostro del presidente del Gobierno. Los presentes no dudaron en seguir insultando al Gobierno. Y, casi media hora después de iniciarse la manifestación, la policía lograba disolverla.

Las manifestaciones contra la gestión del coronavirus se iniciaron en la calle Núñez de Balboa

Las protestas en contra de la gestión de la crisis del coronavirus por parte del Gobierno no dejan de repetirse por toda la capital madrileña.

Si hace solo unos días se iniciaban las mencionadas manifestaciones en una pequeña calle en una de las zonas de mayor capacidad adquisitiva, como es Núñez de Balboa, ahora las manifestaciones en contra de Pedro Sánchez se han extendido a distintas zonas de la capital.

Muchos usuarios de las redes sociales han criticado que, aunque se desplazaron hasta la zona miembros de la Policía Nacional, en ningún momento detuvieron a ningún manifestante ni los identificaron. Lo único que llevaron a cabo fue asegurar que se cumpliera el distanciamiento social, aunque varias imágenes cuestionan que los dos metros de distancia se respetasen. Eso sí, en el momento de dispersar a los manifestantes, los agentes realizaron su trabajo sin problemas.