Las plataformas animalistas han movido ficha y han denunciado a un cazador por disparar, apalear y arrastrar a su perra (que acabó falleciendo) que acababa de dar a luz a unos cachorros. Ante la indignación de los testigos, el hombre contestó que él era cazador y le pegaba tiros a quien le salia de los coj...

Todo sucedió en Chantada, un pueblo de la provincia de Lugo, y aunque la perra fue trasladada al Hospital Veterinario “Rof Codina”, el equipo médico no pudo hacer nada por salvar su vida tras varios días de lucha.

La muerte de la pequeña Alma ha sido un duro golpe para la comunidad animalista en las redes sociales

Ante este brutal caso de maltrato animal, varias protectoras y miembros de las redes sociales han decidido denunciar y ponerse manos a la obra para que el culpable acabe en la cárcel. Según los testigos (gracias a la sangre fría de los mismos, hay como prueba un vídeo donde se puede ver como el hombre arrastra a la perra y la patalea, estando gravemente herida), todo tuvo lugar en Chantada, donde un cazador no solo golpeó, disparó y llevó arrastrando durante varios metros a una perra. También, sorprendió la chulería del agresor.

Según las personas que grabaron el vídeo: el conductor de un vehículo fue testigo de la escena, decidió parar en mitad de la carretera y rescatar a la pobre perra al ver como el hombre la golpeaba y la apaleaba sin ningún tipo de compasión.

En las imágenes, que han sido subidas a Twitter, se puede ver al hombre mientras arrastra al animal, muy malherido, durante varios metros.

El conductor no solo decidió grabar lo que estaba viendo, también, quiso recriminarle al hombre que estuviera llevando a cabo algo tan inhumano. Este le contestó que era cazador y disparaba "a quien le saliera de los coj....".

El suceso ha causado indignación entre las asociaciones animalistas

Los cachorros, que solo tenían 15 días de vida, están a salvo en manos de una asociación animalista. Este suceso, tan bestial y duro, ha provocado una gran indignación en las redes sociales. Además, varias protectoras han dado el paso de denunciar los hechos.

Por ejemplo, la ONG Mundo Vivo ya ha comunicado su intención de denunciar, de manera formal, al cazador por un delito de maltrato animal. A pesar de que se ha intentado, con medicación e, incluso, estudiando la posibilidad de pasar por el quirófano, todas las posibilidades para la pequeña, finalmente, ha muerto.

Si llegase a juicio, el agresor podría tener que enfrentarse a una pena que iría entre un año y 18 mese de cárcel y tendría que hacer frente a una multa por la cantidad de 30.000 euros. Actualmente, es muy díficil que un cazador acabe en prisión por un caso de maltrato animal; pero, el movimiento popular quiere cambiar eso.