La asociación “We can be heroes” ha presentado este chupa-chups realizado en hielo, que ya han patentado para poder evitar los terribles efectos secundarios de la quimioterapia.

“We can be heroes” es una asociación sin ánimo de lucro ubicada en la ciudad de Valladolid, que ya había presentado hace unos meses la patente de un molde realizado en hielo y específico para poder emplearlo en los tratamientos habituales de quimioterapia que tienen que seguir los enfermos de, por ejemplo, Cáncer de mama y que impediría la mucositis, que es uno de los efectos secundarios más habituales de la quimioterapia.

La asociación quieren que los enfermos de cáncer lo enfrenten de forma positiva

La mucositis es el nombre que recibe la inflamación en la mucosa dentro de la boca y de la garganta, cuya consecuencia son las llagas y las úlceras. Este tipo de dolencia se produce en un 40% de los pacientes que tienen que recibir tratamiento de quimioterapia para poder hacer frente al cáncer.

We can be heroes” es una asociación, sin ningún tipo de ánimo de lucro, que nació para poder apoyar a los enfermos de cáncer y a las mujeres que tienen que hacer frente al cáncer de pecho, a sus familiares y a las personas que rodean a los enfermos.

La asociación busca dignificar la vida de todas y cada una de las mujeres que deben enfrentarse a este tipo de pruebas, para que vivan la dura experiencia de una manera positiva y luchadora, dándoles coraje y apoyando en todo lo necesario.

La solución que han encontrado es la creación de un chupa-chups, que ofrecen en los propios centros sanitarios, para poder hacer la misma función que chupar cubitos de hielo o helados-polos de sabores diferentes a lo largo del tratamiento.

Muchos pacientes indicaban que chupar cubitos de hielo era muy incómodo en el hospital

Los enfermos veían muchas incomodidades a la hora de chupar hielo, como se hacía de manera tradicional, ya que no tenían ningún tipo de soporte para sujetar el hielo y, para poder evitar el consumo de polos de sabores que provocaban problemas de digestión en muchos pacientes (otro efecto de la quimioterapia).

El producto que han presentado es una especie de molde, que es apto para cualquier tipo de congelador que forma una esfera de hielo adaptada a cada forma de la boca del enfermo y contiene un palo para poder facilitar el consumo de este tipo de chupa-chups durante el tratamiento.

Este invento surgió de la experiencia personal de Ana, la propia presidenta de la asociación, de 29 años de edad, que ha superado un cáncer de pecho. Este chupa-chups se incluirá en el pack “Kit We Can”, que la propia asociación va a donar a varios hospitales de la ciudad de Valladolid.