Sanidad ha decidido que a partir de ahora el paracetamol solo se podrá adquirir con receta, la principal razón es que un medicamento tan habitual en nuestros hogares puede conllevar una serie de riesgos, si se toma de manera irresponsable.

Es muy normal que en caso de fiebre alta, dolor de cabeza, dolor articular o por un golpe se apueste por el uso del paracetamol, el medicamento más popular de los paraaminofenoles, que posee efecto analgésico y antipirético, lo que hace que sea ideal para calmar el dolor y bajar la fiebre, de manera respectiva.

El paracetamol y el ibuprofeno se suelen confundir por culpa de creencias populares sin base científica

La gran diferencia con el ibuprofeno es que el paracetamol no tiene propiedades antiinflamatorias. Lo que limita su uso en caso de artritis, dolor de garganta o esquinces, aunque se utiliza para ello popularmente.

La polémica ha venido provocada por la decisión del Ministerio de Sanidad de que sea necesario acudir al médico para lograr una receta con la que se podrá adquirir el popular medicamento. La realidad es que tomar paracetamol de manera incontrolada puede provocar una serie de peligros para el paciente que, en la mayoría de casos, desconoce.

La dosis habitual de paracetamol es un sobre o comprimido cada ocho horas, de manera que coincida con alguna de las comidas principales.

Pero, si se realiza en dosis más altas, sin recomendación médica, puede provocar daños importantes en el hígado, por lo que no se debe superar los 4 gramos máximo al día por seguridad. Si se supera esta cantidad, se tienen muchas posibilidades de sufrir un fallo hepático con las consecuencias que pueden surgir.

El último gran cambio fue en el año 2017, pero no se redujo el consumo de paracetamol

No es la primera vez que se toma la medida de que los pacientes deban ir al médico para poder adquirir paracetamol en la farmacia, ya que depende de la dosificación y del número de dosis que se presenten en la caja. Las pequeñas dosis de 500 o 650 miligramos o que contengan un gramo con un máximo de diez dosis, no requerían receta.

Pero, las presentaciones con más de diez dosis de un gramo de paracetamol, sí era obligatorio desde el año 2017.

Luego de valorar las cifras de las ventas en las farmacias, después de dos años desde el último cambio, se ha demostrado que se vendía mucho más paracetamol de lo recomendado sin receta, a pesar de la obligatoriedad. Y esto podría conllevar a una serie de riesgos por el mero hecho de emplear este medicamento de manera irresponsable. Se espera que con la restricción a la hora de adquirir este medicamento, se reduzca la posibilidad de que aparezcan efectos secundarios indeseados.