Después de varios meses de especulaciones sobre las posibles causas detrás de la muerte de la intérprete irlandesa y estrella de la música internacional Sinéad O'Connor, la Corte Forense de Southwark, en Londres, ha informado este 9 de enero que el deceso de la artista ocurrió debido a causas naturales.
En una concisa conclusión, el tribunal forense sentenció: “La señora O’ Connor murió por causas naturales. Por lo tanto, el caso queda cerrado”. De esta manera, los expertos que intervinieron en la investigación dan por terminado el expediente y se liberan de cualquier tipo de responsabilidad sobre el mismo.
Según manifiesta el diario español El Mundo, estas autoridades, los coroners o jueces forenses, solo se involucran en indagaciones de fallecimientos cuando los mismos han sido repentinos y sin causas evidentes o con perceptibles signos de violencia.
En ese sentido y por la autoridad que la emitió, la noticia viene a esclarecer el mediático suceso que supuso la pérdida física de la cantante, después de innumerables especulaciones alrededor de la misma.
Una muerte inesperada
A los 56 años de edad, la reconocida cantante irlandesa Sinéad O’Connor fue encontrada sin vida el 26 de julio del pasado año 2023, dentro de la residencia que poseía en Londres.
Hacía solo año y medio que su hijo Shane, de 17 años de edad, se había quitado la vida y, desde entonces, se la asoció con períodos de depresión y profunda tristeza, los cuales solo vinieron a acentuar los trastornos mentales a los cuales siempre se la vinculó, pues sufrió maltratos y una difícil relación con su madre durante su infancia; experiencias estas que siempre reflejó en sus letras y en su creación musical.
Un ícono de la industria musical
Su muerte conmocionó a la comunidad internacional, pues Sinéad se había convertido en un ícono musical de los últimos años del siglo XX, en especial tras su versión en 1990 de la canción “Nothing compares 2 U”, de Prince, a la cual aportó su auténtica y fuerte voz.
Sinéad daba una imagen revolucionaria de la mujer dentro de la industria musical: con cabeza rapada, pantalones y botas; además de un discurso rebelde, cargado de sentido filosófico y contrario a la sexualización de la figura femenina en el mercado de la Música y el arte en sentido general. Llegó a publicar diez trabajos discográficos, el último de ellos lanzado en 2014.
