Íñigo Onieva recientemente habría sido despedido de la empresa Tatel en la cual trabajaba como Relacionista Público desde hace, al menos, dos años. Sin embargo, el ingeniero, lejos de quedarse de brazos cruzados, ha decidido montar su propio restaurante, un proyecto que probablemente salga a la luz en el 2024. Según informó Semana, el empresario no llegó a un acuerdo financiero con el grupo y le exigieron nuevas funciones laborales por el mismo sueldo, algo que no aceptó. Su salida de Tatel fue repentina, pero lo ha impulsado a incursionar él mismo con este nuevo emprendimiento del mundo de la gastronomía.
El restaurante de Íñigo podría inaugurarse a comienzos del 2024
Indudablemente que Íñigo es un amante del arte culinario y en estos días se ha ilusionado con la apertura de su propio restaurante. Aunque está trabajando en ello, no abrirá el nuevo local hasta el próximo mes de enero. Tiene grandes ideas y plena seguridad que este proyecto funcionará.
Indiscutiblemente, Tamara Falcó estará de su lado brindándole su apoyo incondicional y le dará algunos consejos importantes, sin embargo, la marquesa no formará parte de este nuevo negocio. Y es que Íñigo desea montar este negocio él solo y demostrar que sí puede lograrlo.
Íñigo cuenta con el apoyo de su familia y de su novia Tamara Falcó e inevitablemente su elevada repercusión mediática podría ayudarlo a tener una excelente clientela.
El joven usará su experiencia en hostelería para manejar, de la mejor manera posible, este nuevo emprendimiento.
Los viajes de Íñigo le podrían ayudar en su nuevo negocio
Es importante recordar que Íñigo ha viajado mucho, ha conocido muchas gastronomías internacionales y ha observado personalmente el funcionamiento de grandes y exitosos restaurantes.
Probablemente, esto le ha incitado a comenzar con este nuevo proyecto gastronómico y luchar para tener sus propios ingresos financieros derivados de su propio trabajo. Mucho más ahora cuando pronto se convertirá en un hombre casado.
Y es que esta semana se supo de su salida de Tatel. Al respecto, Belén Esteban dio algunos detalles sobre la situación laboral del ingeniero.
Mientras, fuentes cercanas al entorno de Íñigo desvelaron a Semana que la proyección de Íñigo en Tatel era “muy limitada”. Además, en las recientes semanas le solicitaron un cambio de sus funciones, pero no se habló de un aumento de su salario. Comentaron además que el contrato laboral de Íñigo se resolvió amistosamente y sin ningún inconveniente.
La misma fuente ha desvelado que Íñigo está inmerso en un proyecto “muy bonito” el cual será inaugurado a comienzos del año próximo. El empresario hará todo lo posible porque así sea y trabajará en ello cuando regrese de su luna de miel. Se supo además que durante estos días Íñigo ha viajado nuevamente a Lourdes.