El chef Enrique Garcerán ha muerto en Puerto Rico de manera inesperada a los 34 años. El experto culinario residía en la isla para desarrollar su carrera, pero lamentablemente este miércoles ha sufrido un fatal accidente vial en el que ha perdido la vida, según reportes de la policía local. El famoso chef estaba manejando su automóvil en una de las carreteras principales de la localidad de Ponce, situada al oeste del país, cuando desafortunadamente perdió el control a causa de la alta velocidad.

Este triste suceso ocurrió a las 23 horas del miércoles de esta semana, cuando su camioneta se estrelló violentamente contra un árbol e impactó fuertemente su Jeep Gladiator contra la verja de una casa; según informó la policía.

Las autoridades explicaron que la víctima conducía a una velocidad que, al parecer, no le permitió controlar el volante. Su fallecimiento ocurrió instantáneamente, tras sufrir severas lesiones.

El chef Enrique Garcerán trabajaba en Puerto Rico desde el 2018

En el año 2018, Enrique preparó sus maletas y decidió incursionar en el mundo culinario de Ponce, una región situada al oeste de la isla puertorriqueña. Su especialidad fue la cocina tailandesa y esto le permitió ocupar un destacado lugar entre los grandes cocineros. Dirigía las cocinas del restaurante Baleares del Hotel Meliá y tenía un estilo muy particular, que fusionaba las recetas de origen caribeño y mediterráneo.

Enrique nació en Madrid, pero se formó en el extranjero como chef.

Primero asistió al instituto Le Cordon Bleu, tras graduarse viajó por muchos países, estuvo en Bangkok donde se especializó en cocina tailandesa, convirtiéndose en un experto e inclusive dio clases de esta especialidad culinaria en Bolivia.

Javier Bustillos dijo que Enrique Garcerán conquistó el corazón de sus comensales

Enrique también era colaborador del restaurante Níspero Asador, vinos y coctelería.

Javier Bustillos, administrador de estos negocios, ha escrito un mensaje de pésame en su cuenta en Facebook para sus familiares y amigos lamentando la sensible pérdida.

Javier aprovechó la oportunidad para destacar la gran labor profesional del famoso chef, escribió que su pasión por el mundo de la cocina y su sed insaciable y amor por el trabajo le ayudaron a conquistar el corazón de todos sus comensales.

Comentó sobre la determinación de Enrique y su liderazgo, que lo llevaron por todo el mundo y dejó una huella en los continentes que visitó. Javier escribió además que siempre recordarán a Enrique y le agradeció sus valiosos aportes a la industria de la gastronomía de la isla de Puerto Rico. Finalmente le deseó que descansara en paz. Javier se despidió de Enrique con mucho cariño, desveló su gran admiración, tras varios años compartiendo ilusiones y fogones. Paz a su alma.