‘Tierra de nadie 4’ ha resultado bastante anodina y eso se ha notado en la audiencia que no sigue mayoritariamente el reality. Un 16,4% de share en un reality como ‘Supervivientes’ no es ningún éxito. Tal vez por eso y a pesar de su insistencia, Kiko Matamoros ha sido salvado por quinta vez y debe seguir en Honduras aunque no haga nada y esté cada día más rebotado. Lo único destacable de la noche fue el rifirrafe que se montó en plató entre los defensores de Alejandro Nieto y Marta Peñate.

Los defensores de Marta y Alejandro no se pueden ni ver

Todos los compañeros de Alejandro Nieto se han quejado de lo mal que hizo las negociaciones con Yulen que literalmente lo llevó al huerto, como le señaló Carlos Sobera a su defensor, que como disculpa decía que Alejandro es muy noble porque se disculpa, como si pedir perdón arreglase el desastre de una negociación en la que lo único que hizo bien fue comer hasta hartarse, para desespero de Marta.

Cesar Arévalo, el defensor de Alejandro, opinaba que es tan buena persona que incluso hablaba de llevarse a Marta al paraíso si ganaba la prueba: “Yo no le dirigiría la palabra ni le daría peces”. Tony Spina, defensor y novio de Marta saltaba diciendo no comprender tanta inquina porque, aunque los dos concursantes tienen sus diferencias, acaban llevándose bien.

Carlos Sobera marca el límite al defensor de Alejandro

Cesar Arévalo, que ya ha demostrado que a pesar de intentar ir de calmado y con educación salta a la mínima, no pudo reprimirse más y se dirigió con muy mal estilo a Tony, diciéndole que había una línea roja que no iba a permitir que el defensor de Marta la cruzase y que se lo decía mirándole a los ojos.

Tony Spina mostraba su perplejidad contestando: "¿Qué línea roja? ¿Qué dice este señor?". A lo que el defensor de Alejandro Nieto replicaba muy alterado que no fuese de macarra con él y que cuidase las formas.

Carlos Sobera no dudó en zanjar una discusión que iba tomando tintes preocupantes y se dirigió muy serio a Cesar Arévalo para decirle que el único que tenía rotulador era él y que las líneas rojas o de cualquier color, las marcaba él.

Cesar Areválo replicaba que se callaba por respeto y Sobera incidía: “Por respeto no solo a mi sino al resto de compañeros y al público. Vamos a centrarnos ¿De acuerdo?”, recibiendo como respuesta un seco asentimiento por parte del defensor de Alejandro Nieto, que ya ha protagonizado trifulcas con otros defensores y colaboradores y que de seguir por ese camino es candidato a abandonar el plató en cualquier momento.

El debate transcurrió de nuevo sin incidentes hasta que una broma de Carlos Sobera a Oriana Marzoli al decirle que se iba para Honduras este jueves, hizo que la colaboradora entrase en pánico y se negase en redondo creando el momento cómico de la noche.