José Ortega Cano ha reaparecido después de que ayer saltara la noticia de un empeoramiento en la salud del diestro tras ser dado de alta. El padre de Gloria Camila lo ha hecho a través de las redes sociales de su mujer, Ana María Aldón, que desde que se conociera la intervención quirúrgica al maestro, no lo ha dejado solo ni un solo momento.

Su primera aparición después de abandonar el hospital

En la imagen compartida por la colaboradora de televisión, a través de varias stories de Instagram, se puede ver a Ortega Cano sentado en la cocina de su domicilio junto con su esposa y Marina, la niñera de su hijo José María, que hoy se encontraba de excursión para celebrar el final de curso.

Tanto Ana María como la cuidadora aseguran echar de menos al pequeño, algo que también comparte Ortega Cano quien, sin embargo, opta por no compartir ninguna palabra ante la cámara de su mujer y solo se limita a saludar a los followers.

Pese a su silencio, las imágenes demuestran que el diestro, aunque todavía se encuentra débil, se recupera favorablemente de su operación. Algo que tranquiliza a su familia, que en el último día habían manifestado su preocupación por el empeoramiento que José sufrió poco después de ser dado de alta.

Su empeoramiento podría deberse a una bajada de tensión

Y es que el viudo de Rocío Jurado, que fue dado de alta tan solo un día después de su intervención, abandonaba el hospital por su propio pie y declarando que todo había salido "bien".

Sin embargo, solo unas horas después de regresar a su domicilio, su estado de salud empezó a empeorar.

Fue la propia Ana María quien, en contacto con reporteros de Telecinco, aseguró que su marido se encontraba todavía muy débil llegando, incluso, a casi caerse durante el trayecto a casa. Según la propia colaboradora, todo podría deberse a una bajada de tensión, por lo que, a pesar de la preocupación inicial, su entorno confía en que se recupere pronto y "vaya cogiendo el tono".

La operación transcurrió sin complicaciones

A pesar de que la salud de Ortega Cano sufrió un traspié después de ser dado de alta, lo cierto es que la operación a la que fue sometido no presentó complicaciones y se desarrolló según lo previsto. Tal fue la respuesta del diestro tras su intervención, que José fue dado de alta al día siguiente de ser operado, y no dos días después como estaba previsto, pues las primeras informaciones, reveladas por su hija, apuntaban a que tendría que estar monitorizado durante 48 horas y bajo observación.

El maestro estuvo muy bien acompañado y cuidado durante el tiempo que permaneció en el hospital, pues además de su inseparable Ana María Aldón y su hija Gloria Camila, también recibió la visita de sus hermanos, quienes no pudieron disimular su preocupación antes de comprobar, en primera persona, el verdadero estado de Ortega Cano.