Sin duda, 2020 ha sido el año del gran cambio personal y físico de Rocío Flores. Después de su paso por 'Supervivientes', donde sorprendió a todos con su temple y actitud y sus llamadas de atención a su madre, Rocío Carrasco, la hija de Antonio David Flores ha logrado mantener su figura cambiando por completo sus hábitos diarios.

Además, su participación en el concurso de supervivencia le ha servido para mejorar su vida profesional, aumentando su repercusión en redes sociales y sus trabajos con diferentes marcas como toda una influencer. Asimismo, recientemente ha tomado la decisión de irse a vivir con su novio, Manuel Bedmar y las últimas publicaciones de la ex concursante dan cuenta del buen momento personal que está viviendo.

Adelgazó 16 kilos en los Cayos Cochinos

Su paso por 'Supervivientes' en 2020 sirvió a la hija de Antonio David Flores para que el mundo conociera su forma de ser. Siempre había estado en la sombra y su primera aparición pública fue para defender a su padre mientras concursaba en 'GH VIP'.

Su labor como defensora levantó grandes elogios y supuso un punto de inflexión en su vida profesional. Después, con su participación en el concurso de los Cayos Cochinos, terminó de consagrar su buena imagen pública. Con su actitud conquistó a gran parte de la audiencia y, además, logró uno de sus objetivos en la isla: adelgazar.

Rocío Flores perdió nada más y nada menos que 16 kilos en Honduras, y después de cinco meses desde su regreso, ha logrado mantener su peso estable y evitar el temido efecto rebote de los participantes en el concurso de supervivencia de Telecinco.

Muchos son los que sufren esta consecuencia después de perder peso en la isla fruto de las duras condiciones que experimentan durante su participación. Por ello, suele ser habitual que en pocos meses todas las personas que concursan en 'Supervivientes' vuelvan a su forma física previa al programa, recuperando el peso perdido de una forma muy rápida.

Sin embargo, Rocío Flores ha ido por el camino contrario y ha conseguido mantener el nuevo peso, con el que se encuentra más cómoda consigo misma.

El deporte en ayunas, su secreto

El secreto detrás de esta hazaña sería, según ha confesado la propia protagonista en sus redes sociales, hacer deporte de cardio en ayunas. Cada mañana, antes de ingerir cualquier alimento, Rocío Flores realiza ejercicio cardiovascular e incluso boxeo, algo que le ayuda a mejorar su condición física y mantener el peso deseado.

También ha cambiado su alimentación y ha comenzado a cuidar más el tipo de comida con la que se alimenta. Ejemplo de ello son sus recientes publicaciones en Instagram, donde cuenta con 619.000 seguidores, en las que se puede observar que el cambio físico con respecto a antes de entrar en 'Supervivientes' es espectacular.

Rocío Flores se apunta a los tratamientos de belleza

La hija de Rocío Carrasco y Antonio David Flores también se ha apuntado a tratamientos de belleza y de tonificación corporal. Su objetivo es verse bien y lo está consiguiendo. Así, ha recurrido a la maderoterapia para tonificar, reafirmar y combatir la celulitis. Además, ha acudido a diversas clínicas de belleza para someterse a tratamientos con el objetivo de mejorar su imagen.

También se ha sometido a un tratamiento epigenético para ayudar a combatir la grasa acumulada y moldear la figura. Pero sus intervenciones estéticas no terminan ahí. También se ha maquillado permanentemente las cejas en polvo y se ha inyectado ácido en la nariz y en los labios. Sin duda, las claves detrás de su notable cambio físico.