Lydia Lozano ha concedido una entrevista en la revista “Lecturas” donde ha dado su punto de vista sobre el conflicto entre Rocío Carrasco y su hija, Rocío Flores (“Supervivientes 2020”). La colaboradora de “Sálvame” lo tiene muy claro: mientras Rocío Carrasco siga con su actual marido, Fidel Albiac, no va volver a estar al lado de sus hijos, sobre todo, de su hija mayor, Rocío Flores.
Después de estar encerrada en su casa durante 35 días por culpa del coronavirus, la periodista ha vuelto a su puesto de trabajo llena de energía y siendo muy crítica con el papel de Rocío Flores en el reality que está teniendo lugar en Honduras.
Lydia tiene muchas ganas de trabajar en la radio
A lo largo de estos años, Lydia siempre se ha mostrado como una mujer muy divertida, entregada a su trabajo y 100% profesional, pero con un sueño que está deseando cumplir: trabajar en la radio. En su juventud, la entonces reportera tuvo relaciones sentimentales con famosos que habrían hecho que fuera un rostro de la prensa del corazón. De su querido marido, Charlie, lo que le enamoró fue su inteligencia, su gran sentido del humor y, hoy en día, es su “Google” particular.
Y, sin pelos en la lengua, la periodista da su punto de vista sobre todo lo que está sucediendo en la actualidad. Por ejemplo, Rocío Flores sabe que no va a volver a tener contacto con su madre mientras esté el marido de ésta, Fidel Albiac, en su vida.
Así de claro y contundente.
Lydia admite que ha pasado auténtico miedo durante el tiempo que ha permanecido metida en casa por culpa del confinamiento
Tras pasar cuarenta días en su casa sin poder ir a su puesto de trabajo, ha querido decir todo lo que se ha tenido que callar a lo largo de todas estas semanas. Salir del confinamiento, para la periodista, ha sido una verdadera fiesta.
Un subidón que la periodista está convencida que vivirán otras personas que van a salir de su casa o volverán a su puesto de trabajo después de casi dos meses de confinamiento.
A lo largo de estos días, Lydia ha tenido mucho miedo ante lo que podría pasar. Está convencida de que las personas de entre 40 y 50 años son las que peor lo están pasando al tener que estar encerrados en su casa y ante el miedo de poder pillar el virus.
Para la periodista fue muy complicado, pues es una persona sociable, a la que no le gusta la soledad, aunque hay momentos en los que necesita su espacio.
En su juventud, Lydia vivió muchas historias sentimentales, incluso su madre le llegó decir que su corazón parecía una pensión porque estaba siempre lleno. Ha ligado con personas muy conocidas y podría haber dado para 500 “Sábado Deluxe”. Pero era otra época y siempre ha querido ser conocida por su trabajo.