Los últimos meses en la vida de Rocío Flores han sido duros, extraños, aguantando una presión enorme por el simple hecho de defender a su padre en el plató de Gran Hermano VIP 7”. Pero, ayer, durante la gala en la que su padre acabó siendo expulsado, la joven no aguantó más y se rompió.

La joven se ha despedido de los platós de Televisión para centrarse en sus estudios de nutrición y recuperar la vida que llevaba antes de toda esta locura, unas palabras muy conmovedoras que han vuelto a demostrar que la joven ha sido la gran sorpresa de esta edición.

La joven ha sido la gran sorpresa de esta edición

Queda muy poco para el final de “Gran Hermano VIP 7” y anoche se comunicó el nombre de las dos primera finalistas: Noemí Salazar (la nombrada por la audiencia como el mueble oficial de esta edición) y Alba Carrillo (que no cuenta con el apoyo del público). Pero, el que ha sido expulsado ha sido uno de los favoritos de la edición, Antonio David Flores, que perdió ante Adara (que parece quedarse como la gran favorita del público para ganar esta edición).

Con la expulsión de Antonio David también llegó el momento de decir “adiós” a otra persona que ha sido fundamental para esta edición: Rocío Flores. La joven se rompió en directo, al no poder aguantar más la presión que llevaba desde que su padre decidiera entrar en la casa.

Ante la salida de su progenitor de la mediática casa, la nieta de la cantante Rocío Jurado, ha tenido que despedirse del plató donde ha estado defendiendo a su padre durante los últimos tres meses. Un papel que ha hecho con sobresaliente y demostrando que es capaz de apoyar y luchar contra todo tipo de adversidades.

Rocío se ha ganado el cariño del público y del presentador

Jorge Javier Vázquez no pudo evitar abrazarla y le aseguró que le iba a dar pena no volver a verla en el plató, con la voz casi rota por la emoción.

Rocío ha querido agradecer todo el apoyo recibido por parte del presentador de Badalona y como le ha hecho tan fácil esta experiencia, ya que, al principio no le fue fácil.

Le quiso dar las gracias públicamente por el trato recibido y como supo respetar los límites que ella misma se había marcado sin dejar por ello, de trabajar. Igualmente, quiso dar las gracias a todas y cada una de las personas y a todos esos profesionales que están detrás de las cámaras que le han hecho el camino mucho más fácil.

Al final, aunque le costó, la joven cree que ha logrado cumplir el objetivo: defender a su padre y pasarlo bien en el plató (algo que le pidió el prorio Jorge Javier al inicio de esta aventura). Sin duda, Rocío Flores ha sido la gran sorpresa de esta edición y se va por la puerta grande por el gran papel que ha hecho.