La gala de anoche, “Gran Hermano: Límite 48 horas” ha estado marcada por el protagonismo de Adara y del Maestro Joao que, finalmente, se juegan su continuidad en el programa. Ayer, por ejemplo, Adara recibió el primer mensaje de amor público por parte de Gianmarco. Ambos tuvieron una conversación en pleno directo y no duraron en mostrar sus sentimientos, a pesar de que muy pocos seguidores del programa se creen al italiano.
La dirección consideró que debían ser los ex-concursantes lo que deberían hacer los alegatos a favor de los nominados
La dirección del mencionado programa quiso pedir ayer que el alegato para salvar a alguno de los concursantes nominados no fuera por parte de familiares.
La dirección prefirió que los concursantes de “GH VIP 7” recibieran el apoyo de algún ex-compañero de la casa que están en el plató. Dinio, por ejemplo, fue el encargado de pedir la salvación de Hugo Castejón (que se convirtió en el concursante menos votado por el público y se salvó de manera inmediata); Pol Badía defendió a su ex-pareja, el Maestro Joao, con polémica incluida, ya que, el vidente acabó llorando y destrozado al escuchar las palabras del joven; y, para terminar, Gianmarco se encargó de llevar a cabo un alegato a favor de Adara. Un alegato que se convirtió en un verdadero mensaje de amor.
Adara se mostró nerviosa y encantada de escuchar las dulces palabras de su ex-compañero en la casa de "Gran Hermano VIP"
El italiano fue el último en entrar en directo en contacto con los concursantes de la casa y Adara terminó con una gran sonrisa al escuchar las palabras de su ex-compañero. Lo primero que le dijo es que estaba bellísima.
Después, dejó claro que quería que se quedase, ya que, siempre ha sido sincera y completamente real. A lo largo de estos días la ha visto muy triste y espera que deje de estar así. Y, la sorpresa vino cuando el italiano le dijo que la estaba esperando y que esté tranquila.
El italiano quiso remarcar que echaba mucho de menos a su amiga en la casa, la que ha sido su mejor amiga durante la convivencia.
Incluso, le quiso hacer llegar que la echa mucho de menos. Y, tiene la misma sensación que cuando sabes que te van a regalar algo y tienes que esperar a recibirlo.
Al escuchar sus palabras, Adara no pudo evitar sonreír. Incluso, llegó a decir que le había entrado la risa nerviosa, ya que, las palabras que le ha dicho el italiano le han parecido muy bonita y ella, también, le echa mucho de menos. Incluso, llegó a confesar, pensando que nadie la veía, que se estaba poniendo roja. Y, después, cuando los alegatos terminaron, Adara quiso dar las gracias a su compañero por sus palabras y que espera verle fuera en unas semanas.