Ayer tuvo lugar un hecho histórico en la Televisión actual: Mila Ximénez selló la paz, tras años de discordia, con la tonadillera Isabel Pantoja. Según la periodista, por su parte, la guerra ha terminado. Pero avisa que no va a callarse nada, si tiene algo que decir sobre Isabel Pantoja, lo dirá, aunque a esta le pueda doler. Ha tomado esta decisión, según ha explicado la colaboradora de Telecinco, después de ver un cambio de actitud por parte de Pantoja, que ha sido muy trabajadora durante su paso por el programa de supervivencia.

Mila Ximénez empezó a hablar mal de Isabel Pantoja cuando la tonadillera inició su relación con Julián Muñoz

Mila Ximénez se ha dado un abrazo con la que ha sido su archienemiga durante la última década, en los pasillos de Mediaset, ante la sorpresa de la propia Paz Padilla, que admitía que nunca se hubiera imaginado ser testigo de un momento como este: hay que recordar que Mila Ximénez volvió a los medios de comunicación, en el desaparecido Aquí hay tomate, después de hacer unas declaraciones en las que aseguraba que Isabel Pantoja era un ser siniestro, oscuro... y para posicionarse a favor de Maite Zaldívar, cuando se inició el culebrón de Marbella y que provocó que Mila se convirtiera en una colaboradora habitual de los programas de televisión.

Según ha explicado la propia Mila, al volver al plató de Sálvame, fue un momento muy complicado de describir, incluso le bajó la tensión y no sabía si se iba a desmayar. La periodista se ha mostrado encantada con todo lo que está sucediendo en su vida y con este momento con la tonadillera. Además, considera que la propia Isabel Pantoja ha sido muy generosa al decirle que quería hablar personalmente con ella.

Mila ha confesado que terminar una guerra con la cantante, que estaba durando demasiado tiempo, la llena de tranquilidad y de una sensación de paz díficil de explicar.

Mila no ha dudado en pedirle disculpas por el dolor causado

Según la colaboradora de Sálvame, ella ha descubierto a una nueva Isabel Pantoja en la isla de Honduras, con una serie de matices que no conocía, a pesar de que llevan años en guerra.

Según la periodista, el problema de la tonadillera es su círculo que es muy poco recomendable y no tiene nada que ver con su círculo familiar (la mitad, contratados en Mediaset como colaboradores en diferentes programas). Además, la cantante ha trabajado todos los días en la isla a pesar de las críticas recibidas. Es cierto que tiene un punto cuestionable de soberbia, pero eso lo tienen todas las personas que trabajan en televisión.

Por toro lado, su papel como madre o cómo ha cambiado Kiko Rivera en los últimos años, han hecho que Mila haya apoyado a ciegas a la tonadillera, a pesar de que sus propios compañeros no la entiendan.