La cantante española de Cataluña y jurado del programa Operación Triunfo, Mónica Naranjo y su representante y marido Óscar Tarruella hicieron pública su separación sentimental este lunes a través de un comunicado de prensa. La pareja explicó que habían tomado la decisión de escribir este comunicado con la intención de no solamente informar al público su separación y futuro divorcio, sino también de aclarar dudas y evitar rumores.

El matrimonio de Naranjo y Tarruella duró más de 15 años. Con esta separación, se pone fin al segundo matrimonio de la Pantera de Figueras que había estado casada anteriormente con el compositor alicantino Cristóbal Sánsano de quien se divorció en el 2002 después de cuatro años de relación conyugal.

La decisión que tomó la pareja tomó a muchos, especialmente los seguidores de la cantante, por sorpresa porque la pareja parecía ser una de las más estables del medio artístico español. Mónica y Óscar habían demostrado públicamente, en numerosas ocasiones su gran apoyo mutuo y conexión sentimental, sobre todo en las redes sociales.

El comunicado

En el comunicado de prensa, que estaba firmado por los dos, la expareja expresó que la decisión de separarse había sido tomada por ambos, con mucho respeto y cordialidad. Los futuros exesposos aseguraron que todavía se tienen mucho cariño y que ese mismo cariño los impulsó a tomar esa difícil decisión.

Además, aprovecharon el comunicado para agradecer al público por todo el respeto y el apoyo que recibieron constantemente desde la formación de su familia hasta el anuncio de su separación.

La pareja también explicó que su ruptura sería solamente sentimental, por el momento, pero que su relación laboral, se mantendría como siempre ha sido. Esa parte hace referencia al puesto que ejerce Óscar Tarruella desde hace varios años como representante de la Pantera de Figueras.

El matrimonio

Naranjo conoció a Tarruella un día en el que llamó a la Policía Catalana para pedir ayuda por un robo que había sufrido en su propiedad poco tiempo después de su divorcio con su primer esposo en el año 2002.

El “Mosso d’esquadra” que llegó en su auxilio fue el mismo Oscar.

Él y Mónica se enamoraron en poco tiempo y se casaron luego de aproximadamente un año de relación, en el año 2003. Después de su boda, la Pantera decidió adoptar legalmente a su hijastro, Aitor Tarruella, al que se refería constantemente como su propio hijo y con mantenía una agradable relación.