La escritura realizada profesionalmente, no es algo que se le dé a cualquiera fácilmente, y mucho menos atrapar a los lectores que constantemente asumen el rol de perseguir, por así decirlo, los escritos realizados por sus autores favoritos, bajo un sendero de críticas o en caso contrario de reacciones favorables para con el responsable de la obra.

Desde los tiempos más antiguos, la escritura ha sido un medio de comunicación que refleja a su vez la capacidad de los escribientes de interpretación, comprensión y análisis, expresado en artículos diversos, lo cual ha evolucionado a través del tiempo, las generaciones, los gobiernos y experiencias adquiridas bajo diferentes circunstancias.

¿Quién fue Tom Wolfe?

Tom Wolfe fue un reconocido cronista estadounidense que nació en Richmond en el año 1930 y recientemente acaba de fallecer a sus 88 años de edad, tiempo que le fue muy útil para aflorar en el mundo de las crónicas y nuevos estilos aplicados a las mismas.

Tom Wolfe, quien fue estudiante de doctorado en Yale, tuvo la oportunidad de ingresar a trabajar como redactor, en principio, en un periódico llamado Springfield Unión, en los años 60, ubicado en Massachusetts, inicios que le dieron paso a desarrollarse en otras revistas con mucho más prestigio para la época como el New York y Esquire, donde emprendió y puso esfuerzo en otra visión de llevar a cabo las narrativas periodísticas.

Tom Wolfe descubrió que las noticias podían contarse de otra forma, agregándole o aplicando el estilo de las narrativas novelescas, lo cual impresionó mucho a los lectores, ya que el estilo era más llamativo y menos tedioso a la hora de la lectura; combinación entre la ficción de la crónica y la realidad, marcaron una gran pauta para esta nueva etapa que empezaba a vivir la narración periodística, estrategia que fue descrita y plasmada en una obra en la que Talese, Truman Capote o Joan Didion fueron autores junto a Tom, la cual se llamó El Nuevo Periodismo.

Obras de Tom Wolfe

Entre sus obras también destacan La Hoguera de las Vanidades, Todo un Hombre y Bloody Miami; Tom Wolfe, fue muchas veces criticado por su forma de redacción, y es que su manera cínica de decir las cosas no era algo que agradara a muchos, sobre todo si se veían involucrados en el asunto, pero a Wolfe no le importaba y en las entrevistas lo hacía saber, evadiendo toda responsabilidad, que afirmaba que el solo hacia la narración, los hechos los hacían los demás.

Con su muerte, Tom Wolfe deja un vacío en el estilo de este tipo de narración, pues, sus libros fueron de gran éxito y se convirtió en un gran intérprete de la sociedad estadounidense.