La peor de las noticias se confirmaba en las últimas horas para Sálvame, Telecinco y la audiencia del programa de corazón decano de la televisión patria. La que ha venido siendo la gran estrella de lo que llevamos de año en los espacios dedicados a la crónica social en la cadena de Fuencarral no volverá a aparecer en antena.

Al menos no durante un tiempo después de que esta haya confirmado públicamente y durante la última emisión de Sábado Deluxe que, a raíz de un problema de salud que sufre, cree es inviable seguir con una sobre exposición pública que sus médicos le han desaconsejado a toda costa.

Hablamos de Gustavo González, quien junto a María Lapiedra está copando la mayor parte de los minutos de este espacio y del Sálvame diario, quien hace unas horas sorprendía a propios y extraños revelando que no está bien. Que sufre una enfermedad que necesita de la tranquilidad que lleva meses perdida por culpa de los jaleos sentimentales que copan portadas y minutos en la pequeña pantalla como si no hubiera mañana.

Concretamente, lo que este contaba por primera vez en público era que está sufriendo momentos de "ansiedad" hasta el punto de confirmar ante todos los presentes que "estoy al límite". De ahí que, pese a saber que profesionalmente va a traerle consecuencias más que importantes, sobretodo a nivel económico, no puede sino hacer caso a lo que le dicen los médicos y por tanto abandonar sus funciones, ya que dice: "no puedo trabajar en estas circunstancias".

Unas dolorosas declaraciones que cambiaban el rostro de algunos de sus compañeros de tertulia en la pasada noche del sábado y llevaban a muchos de los telespectadores más fieles de las noticias rosas emitidas en Mediaset España a mostrarle su más sincera solidaridad a través de las redes sociales.

Otro problema para Sálvame

No obstante, y como era de esperar, no todo el mundo se creyó a pies juntillas lo que estaba contando interpretando que, aunque parezca enrevesado, puede tratarse de su última triquiñuela para vender un nuevo drama y acabar sacando una tajada aún más importante si cabe que las que está percibiendo a través de una vuelta por todo lo alto, a bombo y platillo, en unas semanas o unos meses.

De momento, lo cierto es que la intención de Gustavo González es la de dar un paso atrás, por lo que Sálvame perderá a uno de sus rostros más conocidos y polémicos de este 2018, por no decir que el que más. Otro problema para el programa.