Pues va a ser que no. Que no es oro todo lo que reluce o que tiene color dorado. Ni mucho menos. A pesar de que se nos ha tratado de vender por activa y por pasiva que Belén Esteban está que trina tras su renovación, las cosas no marchan para nada bien para la princesa del pueblo.

Y es que Belén Esteban estaría muy tocada tras un cúmulo de situaciones que le está tocando vivir y que no le estarían dejando para nada vivir feliz, poniendo en alerta a alguno de sus seres queridos, a tenor de lo que se ha venido publicando en varios medios en los últimos tiempos en relación a su presente y su futuro más inmediato.

Más allá de la renovación, lo cierto es que esta sabe a ciencia cierta que el interés que ha venido despertando en los últimos tiempos no deja de menguar. Cada día su vida vende un poquito menos y eso pone en tela de juicio la posibilidad de seguir viviendo de lo que lleva haciendo durante más de quince años hasta que le llegue la edad de jubilación.

Las cifras de audiencia de sus apariciones en televisión hablan por sí solas. A diferencia de lo que ocurría antes, cuando ponerse delante de la cámara significaba un aumento de share considerable, esto ya no es así. De hecho sus últimos "Belenazos" en el Deluxe han mostrado una gráfica descendente. La audiencia parece estar agotándose de siempre lo mismo.

Lo mismo está sucediendo con sus exclusivas en las revistas. A pesar de provocar un aumento de ventas respecto a las portadas normales, esta se está viendo superada una y otra vez por contra publicaciones de la competencia. Tanto es así que su inesperado retorno tras ausentarse de la vida pública tras las navidades en Semana se ha consumado como un verdadero fiasco.

Así se enteraba de la peor de las noticias posibles.

Belén Esteban cada vez vende menos

Mientras que su exclusiva provocó la venta de unos 70.000 ejemplares de Semana, la portada de Jesulín de Hola vendida el mismo día a la misma hora en los kioskos alcanzó la friolera de 246.000 ejemplares, tal y como revelaban los compañeros de Latidos agregando que ha sido esta noticia la que ha acabado de hundir a la de San Blas.

Y es que estos datos no solo revelan que está a años luz de lo que vendió, sino que su ex marido es capaz de prácticamente cuadruplicar en interés y ventas cada palabra que sale de su boca. Los que hablan de su cotización a la baja, y que tanto molesta a Belén, ya no solo tiene argumentos para defenderlo, sino también datos. Su interés decrece y su futuro está en el aire. Lo sabe y le duele.