La reina emérita Doña Sofía está pasando un trance complicado según aseguran diversas fuentes de información. Si hace apenas unos días celebraba su 79 cumpleaños volcada de lleno en sus hijos y en su familia griega al mismo tiempo que lo compaginaba con sus obligaciones reales como la entrega de los premios Príncipe de Asturias o la recepción celebrada en Palma el pasado verano, ahora ha sido un drama familiar lo que generado una gran controversia en el núcleo de la Familia Real y en la propia reina emérita.
El delicado momento de Doña Sofía con sus nietas
Según periodistas como Pilar Eyre en Lecturas corroboran el drama de Doña Sofía en torno a sus nietas, la princesa Leonor y la infanta Sofía. La periodista Eyre desvelaba en su blog de Lecturas que la reina consorte, Doña Letizia, no deja que su suegra, Doña Sofía, ejerza de abuela con sus dos nietas del modo que desearía. No obstante, este asunto se hizo público por la propia reina emérita. Según esta periodista, en una reunión familiar donde la reina emérita explicaba esta cuestión, y rifiriéndose a sus dos nietas admitía que nunca las veía: "No me dejan verlas. Yo que vivo al lado no puedo ir a su casa y sin embargo, la madre de Letizia siempre está ahí".
No obstante no se trata de Doña Sofía la única que está afectada por esta situación con sus nietas, pues según otras fuentes, la propia princesa Leonor lo habría exteriorizado con una compañera de clase, a la que admitía que apenas la dejaban ver a su abuela paterna. De este modo, la relación entre nuera y suegra pasaría por un momento delicado.
Eso sí, no se trata de la única ocasión en la que sale a la luz la tensa relación entre ambas.
La difícil relación entre Doña Sofía y Doña Letizia
La última de ellas ocurría el pasado verano en Mallorca, donde acudieron el Rey Felipe VI junto a su madre y su esposa a la recepción a las autoridades de las Illes Balears. Nada más bajar del coche, el rey Felipe comenzó a saludar al público allí presente conversando con ellos tras varias horas de espera mientras que Doña Letizia estrechaba manos a toda prisa, lo que dio lugar a que ésta se saltara el protocolo pasando por delante de todos los presentes sin esperar a su marido.
Pero el plato fuerte del asunto llegaba a las puertas de Palacio, donde apareció en escena Doña Sofía, vitoreada por el público y saludando mientras que Letizia esperaba a su marido y al encontrarse, ni siquiera miró a su suegra.