El conocido actor Antonio Banderas está generando gran polémica tras lo ocurrido en su ciudad de origen. Bien es sabido que el malagueño tiene numerosos proyectos entre manos, al igual que el festival Starlite, que lleva celebrándose desde 2012 en Marbella y con el actor como anfitrión. Parece que Banderas no ha corrido la misma suerte apostando por una nueva iniciativa en su tierra natal.

El proyecto cultural denominado Astoria-Victoria, situado en la Costa del Sol, no ha tenido un buen desenlace. Si en un principio el actor tenía como objetivo convertir los terrenos del que fuera el cine Astoria en un complejo cultural y de ocio para la ciudad andaluza, siendo él su padrino, Banderas ha abandonado definitivamente esta iniciativa.

Los duros motivos de Antonio Banderas para rechazar el proyecto

Las causas que han llevado al actor a tomar esta drástica decisión han sido, según él, "un trato insultante" por parte de diversos concejales de Izquierda Unida y la marca de Podemos en Málaga, que de ese modo, han acabado con la ilusión puesta en la Costa del Sol para el proyecto cultural. El actor ha querido comunicarle a través de una carta al arquitecto del proyecto su decisión de no comenzar.

No obstante, tras los numerosos impedimentos por parte de IU y Podemos en Málaga para hacer frente al jugoso proyecto, Antonio Banderas, cansado de la situación, ha querido pronunciarse en la gala Starlite. Así, el malagueño afirmaba a ABC: "No quiero ni un duro público porque vienen envenenados".

El artista ha dejado claro que no quiere ser acusado de meter la mano en el bolsillo del contribuyente.

Antonio Banderas arremete duramente contra la izquierda malagueña

Sin embargo, el actor quiso mostrar un gran rechazo hacia los políticos de su Málaga natal. No podía ser de otra manera, teniendo en cuenta la actitud de estas formaciones políticas para con el turismo de la Costa del Sol y los nuevos proyectos culturales.

De hecho, ha comentado muy decidido que lo hará de un modo más acotado, centrándose sólo en el teatro y dando su total negativa para gastar dinero, pues según el malagueño "no se va a gastar el dinero para que le den patadas en el culo".

En definitiva, parece que todo proyecto relacionado con aportar mayor auge al turismo, teniendo como padrino excepcional a Antonio Banderas, ha tenido numerosas dificultades y desavenencias difíciles de gestionar que, finalmente, han tenido un turbio desenlace que se verá repercutido en la economía de la ciudad andaluza.