Quince años después de que la pareja formada por Jesulín de Ubrique y María José Campanario se diera el "sí quiero" en el altar en uno de los momentos más seguidos y comentados por la prensa rosa de este país, el que es uno de los matrimonios más mediáticos está a punto de volver a darse el 'sí' a través de unas segundas nupcias.

Una segunda boda que al parecer se celebrará el próximo día 27 de julio -misma fecha en la que los dos se unieran allá por el 2002- en un lugar indeterminado que podría ser alguna de las fincas del que fuera matador de toros y que ya sin duda alguna, será pasto de una exclusiva que les llevará a ser de nuevo, portada de las revistas del papel cuché.

Eso es al menos lo que varios periodistas del corazón han informado abiertamente, como sucediera en Sálvame, en relación a la venta de la exclusiva de esta "reboda", presuntamente a la revista "Hola", medio que ya ha sido el encargado de llevarlos a portada en anteriores ocasiones y con quien el matrimonio mantiene una excelente relación.

Además de una vuelta al ruedo mediático de ambos que parecía ya haber pasado a mejor vida, la gran noticia que se deriva de la venta de esta nueva exclusiva radica en la cantidad que esta pareja percibirá por dejar que las cámaras y los redactores de la citada revista se entrometan en un momento tan íntimo como el que volverán a vivir.

La culpa de esta intromisión la tendrán, según publicaban nuestros compañeros del portal 'Cotilleo', nada menos que una cantidad fija de 60.000 euros, que ya habrían sido acordados a través de un precontrato, una cifra que se podría ver aumentada de manera sustancial en función de los invitados y del acceso a según qué momentos por los reporteros de la prensa gráfica, en el lugar del enlace y en su posterior celebración.

Andreíta, clave en las negociaciones de la exclusiva

Así pues, en el caso de que la hija del que fuera torero y Belén Esteban, Andrea Janeiro, se dejara fotografiar justo una semana después de cumplir la mayoría de edad y por lo tanto sin necesidad de tener que pixelarle el rostro, la cantidad se podría disparar varias decenas de miles de euros más, sin que de momento se haya podido concretar ni la cantidad ni la presencia de Andrea en este segundo matrimonio entre Janeiro y Campanario.

Sin duda alguna, una "reboda" de lo más lucrativa que volverá a llenar las arcas de la pareja después de que el tiempo haya demostrado que lo suyo iba, a pesar de lo que se barruntó en su momento, muy en serio.