Todos tenemos un pasado, mejor o peor, pero que está ahí y que a menudo nos atormenta. Los famosos, en su gran mayoría, no son una excepción, y el protagonista de esta historia, que ha tratado de llevar al teatro suavizando para todos los públicos y dejándose de lado lo más turbio, es decir, Jorge Javier Vázquez, también.
Y es que el presentador estrella de Telecinco, que últimamente ha sido protagonista por ser el conductor de la edición con menos audiencia de la historia de Gran Hermano, y también por renovar su compromiso con Mediaset España y retomar su labor en la conducción de Sálvame, ha contado en numerosas ocasiones el descontrol que vivió durante su juventud, pasando de cero a cien en muy poco tiempo.
De aquella época se ha contado que este llegó a pasar más tiempo fuera de casa que en la suya de fiesta y que durante este tiempo fue víctima de varios excesos de los que, por suerte, logró escabullirse a tiempo para poder encarrilar su vida como finalmente ha conseguido con éxito y para alegría de todos sus fans.
Fue también durante esa etapa entre los veintipocos y los treinta y pocos cuando este vivió su liberación total al descubrir la sexualidad después de, presuntamente, perder la virginidad con un 'chapero' al que este habría pagado para poder quitarse un peso de encima y que abriría la caja de pandora para acabar manteniendo relaciones con más cientos de hombres, antes de encontrar el amor de su vida.
Un hombre con el que ya lleva muchos años, con el que ha tenido idas y venidas propias de cualquier relación, pero que le ha quitado las ganas de volver a aquella época de desfase a todos los niveles y de la que tan poco se habla en los medios de comunicación, quizás porque el protagonista de la misma no está para nada orgulloso de lo que ha dejado atrás.
Sea como fuere, todo ha quedado ya muy lejos y su vida está plagada de éxito, tanto a nivel personal como profesional. Desde aquí lo ponemos como ejemplo de superación y le deseamos todo lo mejor en la vida a J. J.