Si para algo sirve encerrar a famosos durante meses en una casa es para, además de ver cómo reaccionan al encierro manejando la convivencia con sus filias y sus fobias inevitables, para que la ingente cantidad de tiempo libre de la que poseen a lo largo de los interminables días les acabe empujando a 'soplar' todos esos secretos que no les han podido sacar antes en ninguna entrevista.

En el caso de Aída Nízar, de la que se sabe casi todo, nos acabamos de enterar, más allá de que si tuviese veinticinco años menos trataría de tener algo con su compañero en GH VIP 5 Marco Ferri, que uno de los grandes amores de su vida es un importante político de este país, y que ahora mismo sería la "mano derecha del presidente del Gobierno". Ahí es nada.

Uno de los dos hombres que han marcado la vida sentimental de la polémica concursante de Gran Hermano VIP, según sus palabras, es miembro del Partido Popular, habiéndolo conocido durante el tiempo en el que compartieron estudios en la facultad universitaria y que llevaría a ambos a haber iniciado entonces una relación sentimental.

Aunque esta no ha querido soltar prenda en relación a ese hombre del que estuvo "enamorada muchos años", todos los focos han apuntado a Fernando Martínez-Maíllo, actual vicesecretario de organización de los populares y al que conoce desde hace catorce años. Y es que, cabe recordar, durante un tiempo ya la prensa rosa relacionó a ambos deslizando que entre ellos podría haber habido algo más que una bonita amistad entre compañeros de clase.

El interés por los políticos conservadores parece ser una tónica en la vida sentimental de Aída ya que, como ella misma ha agregado en relación al otro "gran amor" de su vida, este habría participado de forma activa durante los años de transición democrática en España, siendo un importante hombre de estado.

Sobre este nombre las quinielas son mucho más amplias y difíciles de atinar. Lo que parece claro es que ella y otro hombre importante de la derecha española están condenados a encontrarse sentimentalmente. ¿La erótica del poder?.