Telecinco necesita no uno, sino varios giros de timón y así lo está propiciando la cúpula del canal estrella de Mediaset España tomando decisiones de calado como la que se ha tomado ya en relación a la salida de Paz Padilla del programa de corazón de referencia de la parrilla televisiva española y devolviendo el programa a Jorge Javier Vázquez para ver si este es capaz de enderezar la sangría de tele espectadores que viene registrando este espacio.

Una vuelta que llega después de que la conductora gaditana asegurara en una entrevista que tenía la sensación de que algunos de sus compañeros de trabajo se habían salido con la suya, después de intentar "hundirla", calificando lo que le estaba ocurriendo desde dentro del propio programa como "persecución".

Pues bien, por si esto fuera poco, la andaluza ha recibido ahora lo que ha sido calificado ya como la puntilla a esta actitud en su contra por parte de los que ella consideraba sus compañeros de trabajo y que, a su parecen, no han resultado ser con ella lo que esta esperaba en su desembarco en Sálvame.

Esta ha llegado de uno de los nombres propios de la cadena, el de su sustituto, Jorge Javier Vázquez.

En sus primeras declaraciones como presentador retornado a Sálvame, comentó que su vuelta se debía al hundimiento que venía produciéndose en este desde su salida, dejando a la que tomara su relevo al pie de los caballos, agregando a su discurso que el programa "hace aguas", subrayando lo poco que le estaba gustando a él -y parece que lo mismo sucedía con la audiencia- el programa en el que se estaba convirtiendo desde su salida.

Unas declaraciones que no han sorprendido tanto dentro del 'planeta Sálvame' ya que allí, como Paz comentó hace poco, no tenía amigos con los que salir a cenar o tomarse una cerveza, sino compañeros de trabajo con los que trataba de mantener una distancia dada, además, su poca afinidad con la mayoría de ellos. Padilla es historia de Sálvame y sus jefes ya le han dado vacaciones. Veremos si vuelve... y cuándo y cómo lo hace.