Si bien podemos todos estar de acuerdo es que Homer nunca es la imagen del trabajador ideal, mucho menos para una planta nuclear, y es que muchos de los que quieren ver más allá en la serie se fijan en la condición de Homer y en su trabajo como una verdadera expresión de la sociedad americana promedio.
Sin embargo y lejos de querer ser filosóficos sobre una serie que siempre nos ha gustado por ser bastante hilarante, lo cierto es que para que ésta sea así muchas veces ha tenido que recurrir a un sarcasmo que ha representado más de un setenta por ciento de la idea de todas las temporadas.
En este sentido puede decirse que los Simpson han sido sarcásticos con todo, incluidas la misma idea de la niñez, la educación, el amor, el tiempo, la religión, la política y por supuesto en primer lugar con el trabajo y por supuesto con los multimillonarios estadounidenses.
Aún fuera del país norteamericano se puede decir que los Simpson han sido sarcásticos con todo tipo de gobiernos, desde el ya fallecido Fidel castro hasta con el hace años depuesto y ejecutado Sadam Hussein, si bien recordamos todo, los desarrolladores de Fox metieron a todos los tiranos en una misma piscina cuando Homer hizo de su casa una nación independiente.
El trabajo más sarcástico
Si recordamos uno de los sarcasmos más sonados no nos lleva directamente a la política, sino que por el contrario al trabajo en sí mismo.
Si bien hacemos memoria a ese episodio, Homer consigue que le den hacer su trabajo desde casa a través de un ordenador, con lo que no sólo come mucho más y termina engordando a montón, sino que decide delegar su puesto.
Y es que le termina dejando la responsabilidad de su función sobre un reactor nuclear a un adorno de escritorio en forma de pájaro que se mueve de arriba abajo presionando una y otra vez la tecla Enter, lo que, por supuesto al final trajo una verdadera debacle que casi le cuesta la vida a todo el pueblo, para risa de nosotros.
Pero, ¿qué hay detrás de todo esto?
Unas verdaderas predicciones dicen muchos, y es que a la manera de ver a simple vista esta es una advertencia humorística a lo que sería la vida y el destino de nosotros como personas si el trabajo desde casa es llevado de mala manera.