Tremendo bombazo el que se ha vertido en relación a Gran Hermano 17 este fin de semana en la propia cadena en la que se emite el reality show decano de la televisión en España.
Fue en el programa especial de sálvame, 'Sálvame Deluxe', cuando repasando la actualidad, el último minuto, y las últimas horas dentro de la casa, uno de sus colaboradores estrella, y con más solera, decidió soltar por su boquita una confidencia que le había llegado a través de una filtración, y que pronto se traduciría en pruebas que podría demostrar ante la cámara y para toda la audiencia del programa de Mediaset y Endemol: En la casa de Guadalix de la Sierra podría estar compitiendo como concursante una mujer que en un pasado no tan lejano se habría dedicado a la prostitución.
Mareando la perdiz, dejándolo entrever, insinuándolo, pero sin llegar a decir cuál es la bomba que tenía entre manos en ningún momento, Kiko Hernández fue deslizando poco a poco toda una serie de eufemismos, para evitar decir tanto que la prostitución el asunto del que se volvía hablar en relación a una concursante de gran hermano, como el nombre de la protagonista de esta información que podría cambiar para siempre su concurso, y de paso también su vida, ya que según las informaciones, estaría tratando de guardar el secreto bajo llave por todos los medios.
Ante tantas vueltas a la asunto sin llegar a concretar nada, pero sabiendo todos los presentes que hacía ilusión a una concursante de la casa y a su pasado como dama de la noche, una de las colaboradoras que en ese momento no estaba siendo grabada por las cámaras, y que aunque no se puede reconocer claramente, parece que era Gemma López, decidió vociferar por el fondo la palabra 'prostituta', por si alguno de los televidentes y presentes como público en el programa, todavía no se había dado cuenta de cuál era la copla.
Pero en ese mismo instante cuando los televidentes el programa y seguidores de GH 17, hacían correr esta confidencia Como la gasolina por la redes sociales, iniciándose así una especie de caza de brujas poniendo encima de la mesa todos y cada uno de los nombres de los concursantes de esta edición de Gran Hermano.
Desde aquí, como imaginarán, no vamos a entrar en el juego de las quinielas para ver si por una de estas acertamos y esperaremos a que, o bien que cuerna en vez, o bien otro periodista que será la actualidad de este espacio, decida o bien negar la información o bien lanzar la piedra y esconder la mano y decir el nombre y los apellidos y la fuente de esta bomba informativa que promete convertirse en la comidilla de este Gran Hermano 17. Veremos qué acaba sufriendo con este asunto.