La Guardia Civil sigue despertando sospechas sobre lo qué sucedió durante los primeros de la pandemia por el Coronavirus: ha desvelado que Fernando Simón, máximo responsable de la Coordinadora de Emergencias Sanitarias, ocultó en todo momento a las Comunidades Autónomas el informe publicado por la Unión Europea sobre el riesgo de contagio en las manifestaciones como fue el 8-M. Los miembros que forman parte del Instituto Armado han remitido un reciente atestado policial a la magistrada de Madrid que está investigando el alcance, a nivel penal, de la celebración de la convocatoria multitudinaria y apoyada por el Gobierno (hay que recordar que ese fin de semana no solo se organizaba el 8-M, pero el PSOE y Unidas Podemos apoyaron de manera unánime la celebración de dicha manifestación).
El 2 de marzo la pandemia del coronavirus ya era una realidad en la Unión Europea y se pedían medidas para evitar su expansión
El pasado 2 de marzo, la agencia de la UE para la prevención y el control de enfermedades (más conocida por sus siglas, ECDC) emitió un completo informe en el que reclamaba a los estados que forman parte de la Unión para que evitasen cualquier tipo de “acto multitudinario” y que impidiesen las “concentraciones masivas que fueran innecesarias” por culpa del coronavirus y la ya expansión que estaba teniendo lugar. El motivo que se aludía era que al estar demostrado, a nivel científico, que favorecía la expansión del virus del COVID-19, teniendo en cuenta otras pandemias y/o epidemias que han tenido lugar a lo largo de la historia.
Incluso, se recomienda cancelar dichos eventos para poder reducir la transmisión del mencionado virus.
Fernando Simón ni siquiera discutió con las comunidades el informe sobre el coronavirus que había recibido el 2 de marzo
Según la Guardia Civil, el Gobierno español no prestó atención al informe que fue desvelado esta semana por la prensa aunque se supone que, consciente de los riesgos de contagio del coronavirus, decidió autorizar la manifestación feminista que ha tuvo lugar los últimos 8 -M.
Pero las cosas no quedarían ahí.
Según las investigaciones que fueron llevadas a cabo por la Guardia Civil, que fueron actualizadas en el polémico informe que fue remitido a la magistrada en Madrid, Carmen Rodríguez Medel, que se encarga de investigar cuál es el alcance penal de la manifestación del 8-M, el CCAES (Centro de Emergencias Sanitarias y de Control de Alertas) que está dirigido por Fernando Simón ya fue advertido el día 2 de marzo.
Dicho informe le llegó a las 12: 45 horas y el epidemiólogo decidió no reenviarlo a ninguna comunidad autónoma, y ni siquiera lo debatió con las autonomías en el Consejo Interterritorial del área de Sanidad.
Fernando Simón sí prohibió cursos y jornadas con sanitarios para evitar que se convirtieran en vectores de contagio del coronavirus
Según ha denunciado la Guardia Civil, desde el organismo liderado por Fernando Simón se defendió que ya que el documento era de carácter público, el acceso del mismo era general tanto de acceso como de conocimiento, no era procedente su distribución. Pero, de todas maneras, el informe sobre los riesgos de contagio del coronavirus no fue objeto, en ningún caso, de discusión en ninguna de las reuniones que tuvieron lugar.
O sea, en ningún momento se avisó a las distintas comunidades autónomas de la alerta que había enviado la mencionada agencia de la Unión Europea sobre la pandemia.
Esta forma de trabajar choca completamente con las advertencias por parte del Ministerio de Sanidad sobre los eventos con presencia de muchas personas, según ha corroborado la Guardia Civil. El pasado 3 de marzo, 24 horas después de recibir el mencionado informe firmado por la Unión Europea (tanto en el email del propio Fernando Simón como de la CCAES), el experto recomendó que no se llevasen a cabo congresos, cursos de formación de sanitarios, jornadas o seminarios a lo largo de los días siguientes, para evitar que los sanitarios se convirtiesen en transmisores de la propia enfermedad.
