El arzobispo Joan Josep Omella dejó colar a los medios, su participación en la mediación entre Mariano Rajoy y Carles Puigdemont, ante la convocatoria del 1-O y los frustrados intentos de secesión. Todo esto lo dijo en el programa ‘El Diván’, presentado por Sílvia Cóppulo en ‘Catalunya Ràdio’. El arzobispo, para sorpresa de todos, también criticó abiertamente la prisión de los líderes independentistas y criticó la decisión de liberar a los detenidos por el caso de ‘La manada’.

Mediación entre Rajoy y Puigdemont

Omella es el arzobispo de Barcelona y, dada su posición en la jerarquía de la iglesia, trató de mediar entre estas dos corrientes que afectan a Cataluña.

El conflicto ocasionó que se enviaran a prisión a varios líderes independentistas y otros se fugaron a otros países. Lo cierto es que, antes de que todo esto ocurriera y que el curso de los eventos definieran la historia actual, el arzobispo Omella medió con los líderes de los bandos enfrentados. "Rajoy me escuchó muy bien. Y también el señor Puigdemont”, comentó el arzobispo.

El arzobispo sigue ejerciendo sus funciones en Barcelona, Rajoy y Puigdemont no corrieron con la misma suerte. El primero abandonó la presidencia luego de una moción de censura en su contra. El segundo huyó hacia y se encuentra en Alemania esperando la decisión sobre su extradición a España. No obstante la crisis Catalana sigue y en actualidad los diferentes jefes de gobierno intentan dialogar para solucionar el conflicto.

La prisión preventiva a líderes independentistas y el caso de ‘La manada’

Otro de los temas tratados fue la prisión de los líderes independentistas. Para el arzobispo la medida fue exagerada y criticó al gobierno por una prisión preventiva tan larga que solo dejan interrogantes. Recalcó que los juicios deberían de realizarse lo antes posible o que, por lo menos, estuviesen ceca de Cataluña o en sus casas a la espera de que se realicen.

Este comentario sigue la misma sintonía que los planes del gobierno de Sánchez, que aunque ha negado la existencia de presos políticos, ha indicado que evalúa la posibilidad de trasladarlos a una sola cercana a Cataluña.

También Omella no dejó de manifestar su sorpresa por la decisión de liberar a los miembros de ‘La manada’.

Pidió al gobierno una política de “tolerancia cero” con estos casos de abuso, tanto en la iglesia como fuera de ella. Para el arzobispo la impunidad no puede tener cabida en ninguna institución y se deben de realizar los esfuerzos necesarios para evitar estos crímenes.