Mientras los golpistas tomaban los medios de comunicación más importantes del país para tener control absoluto de la información que se difundía a los ciudadanos en el Congreso de los Diputados una línea de sonido ocultada por un técnico de la Cadena SER permitió conocer a los ciudadanos lo que ocurría en el interior del hemiciclo.
El técnico junto con el cronista de la misma cadena de radio relataron el golpe y dejaron los micrófonos conectados para que se pudiera escuchar lo que allí estaba ocurriendo. Durante veinte horas se emitió el relato en directo del intento de golpe de estado desde la entrada a gritos y con disparos del teniente coronel, Antonio Tejero, hasta la retirada de los golpistas la mañana del 24 de febrero.
Sin embargo, a pesar que las imágenes de la tentativa de golpe de estado no se emitieron en directo un operador de Televisión Española pudo grabar durante más de media hora el momento del asalto al Congreso. Esas imágenes se emitieron en diferido en la televisión después que el Congreso fuera desalojado.