El Gobierno autonómico de Cataluña sigue siendo ineficiente en la gestión de la crisis sanitaria provocada por la Covid-19 y opaco al no dar el número de muertes y contagios reales (algo denunciado por el alcalde de Igualada, Marc Castells, la provincia más afectada por el virus). Lo mismo pasa con los datos de los ancianos que residen en geriátricos o en sus casas, los cuales, por un documento redactado por el SEM (Servicio de Emergencias Médicas) de la Generalitat (remitido a los sanitarios el 20 de marzo), sugiere al personal médico que, si son mayores de 80 años, no se les ponga respirador, solo oxigenoterapia.

La medida recoge tanto a las personas afectadas por Covid-19 como por cualquier otra patología crónica con afección respiratoria. Pero esta no solo está dirigida a los mayores de 80 años. También incluye a aquellas personas de entre 75 y 80 años, incluso edades menores.

El Govern aconseja 'optimizar' y reservar recursos solo para aquellos que se puedan beneficiar

Según está escrito en el documento, hay que “optimizar” y reservar los recursos, dado el estado de emergencia que se está viviendo.

Se debe evitar ingresar a personas con escaso beneficio” de las medidas sanitarias para dejar paso a aquellos que sí se pueden beneficiar, en términos de años de vida salvados. Pero todo ello, como aclara la nota, obedeciendo a criterios médicos (criterios objetivos de idoneidad y expectativas de resolución del proceso), siempre avalados por consenso de las sociedades médicas y comités de bioética.

De esta manera, el SEM recomienda a los profesionales sanitarios que convenzan tanto a ancianos y personas con graves problemas respiratorios (como a sus familiares y cuidadores) de que no vayan a un centro médico si se observa “futilidad de las medidas terapéuticas”. Es mejor que se queden en casa para que se les “trate” allí porque, en caso de fallecer, es mejor morir acompañado por los familiares que es un centro hospitalario, donde no habría esa posibilidad, dice el texto según escriben diarios como ABC, La Vanguardia o Libertad Digital, quien ha tachado este proceder como “consignas de medicina de guerra”.

Dada la controversia que ha levantado el documento, Alba Vergés (consejera de Salud de la Generalitat) y Xavier Jiménez (director médico del SEM) han comparecido para negar rotundamente que este diga que no se les vaya a dar atención médica a estos pacientes. Vergés ha precisado que cada caso ha de ser evaluado, sea cual sea el lugar donde se encuentre el enfermo, pues la recomendación de que se los deje en sus domicilios, dice el documento, solo se debe seguir si se puede asegurar “un seguimiento y curas paliativas” por parte de la red de servicios primarios (médicos, enfermeras y personal de ambulancia). Estas recomendaciones son para evitar colapsos en la UCI y el sistema sanitario catalán.

La cura paliativa se realiza con un sedante llamado Midazolam, contraproducente para gente con problemas respiratorios

Sin embargo, el seguimiento y cura paliativa para los afectados de Covid-19 o Enfermedades crónicas dictado en ese documento, tanto para personas que están muy graves como para las que tienen síntomas leves, sería el siguiente: sea en un centro médico, residencia o casa particular, se tratará al paciente con 15 minutos de oxigenoterapia con mascarilla. Si pasado ese tiempo no han mejorado, se les administrará un sedante llamado Midazolam para paliar la disnea. Este sedante es contraproducente (y puede llegar a ser letal) para personas con problemas respiratorios.

La consejera de Salud de la Generalitat afirma queel criterio médico de cada paciente está por encima de estas recomendaciones generales siempre que sea razonado, argumentado y consensuado con pacientes y familiares”.

Pero, pese a que estas sugerencias se hagan para evitar el colapso de los hospitales (y sobre todo de las UCI), no se comprende porqué en el documento Sanitat pide a los sanitarios que no se mencionen la falta de camas en los hospitales o la dosificación de fármacos que se está llevando a cabo por una “probable falta de abastecimiento”.

Jamás se les había dado a los sanitarios semejantes consignas y algunos se niegan a seguirlas

Vergés ha confirmado que lo que recoge el documento del SEM ya era una práctica habitual en los hospitales. Pero profesionales sanitarios catalanes han negado esto rotundamente a ABC, diciendo que, a los mayores de 80 años, con cualquier tipo de patología, se les intubaba y hacían colonoscopias y operaciones invasivas con total normalidad antes de la pandemia del Covid-19.

Jamás habían recibido semejante consigna.

Algunos sanitarios catalanes han asegurado que no cumplirán estas recomendaciones. Según un testimonio de un sanitario dado a ABC. “No voy a dejar que una persona de 30, 50, 70 u 80 años muera mal porque no haya un respirador (…) Me podrán llamar irresponsable y que saturaré el sistema, pero no voy a dejar a nadie en casa que pueda morir". Aunque otros sostienen que “los protocolos están para orientar, pero también para saltárselos cuando es necesario (…) Cada uno tiene su propio sistema ético”. A la par, un juez ha impedido que el Gobierno central paralice una investigación que se está llevando a cabo en Cataluña respecto a su gestión de la crisis del Coronavirus.