Ya lo avisó Kiko Hernández: Chelo García-Cortés iba a responder a las acusaciones de sus compañeros en una exclusiva o previo pago de una buena cantidad de dinero. Por esa razón, no ha vuelto todavía a Salvame Diario, ya que, la periodista contesta dependiendo del dinero que le pagan y recaudar la mayor cantidad posible es el único requisito.
Su paso por Supervivientes 2019 ha empeorado su situación personal y profesional, y no ha reducido sus deudas económicas con Hacienda
Chelo ha tardado dos semanas, desde que volvió de Honduras, en pisar el plató del programa en el que trabaja, Sálvame.
Chelo García-Cortés se marchó a Honduras muy enfadada con el programa que le paga las facturas, en general, y muy distanciada con dos de sus amigas más antiguas y compañeras de trabajo, María Patiño y Gema López. Pero, estar en el reality no solo no le ha arreglado los serios problemas económicos que tiene, por otro lado, ha aumentado sus problemas personales con sus compañeros de trabajo.
Desde el momento de su llegada a España tras su aventura en Honduras, Chelo se había cruzado en varias ocasiones con sus compañeros por los platós de Mediaset, pero todavía no había vuelto a la que era su casa ni había querido responder a los numerosos ataques que había recibido a lo largo de estos tres meses de convivencia en Honduras.
Chelo prefería hacer caja antes que volver al plató donde llevaba años trabajando
A pesar de que en un primer momento, Chelo aseguraba que no iba a Sálvame porque quería tener unos días de vacaciones, en realidad, según explicó Kiko Hernández, la decisión tendría que ver con una razón económica: sabía que salir en una revista y hacer un plató de Sálvame Deluxe le daría más dinero que volver al plató diario de Sálvame.
Chelo está viviendo una época muy complicada, desde un punto de vista económico, después de hacerse público que no solo debía una gran cantidad de dinero a Hacienda, también a una serie de prestamistas. Su relación de casi treinta años con Marta Roca empezó a ser cuestionada. También se le increpó su comportamiento con Isabel Pantoja, con la que fue considerada una verdadera “pelota” y fue acusada de comportarse de manera demasiado servicial para volver a ganarse la complicidad de la tonadillera.
Por otro lado, su forma de tratar a su compañera Mahi fue duramente criticada, por tratar a la joven como si fuera inferior y no parar de darle ordenes. A la vuelta de Honduras, Chelo no ha querido dar explicaciones sobre lo que sucedió en la isla y criticó duramente a sus compañeros de Sálvame por hacer daño a su mujer (que sufre depresión desde hace muchos años), por intentar hundir su carrera profesional y por hacer públicas sus deudas económicas.