Al hablar de Doris Day se recuerda también a Rock Hudson. Esto se debe a que la pareja interpretó el papel de matrimonio americano ideal en los años 50. Algunos de los éxitos que protagonizaron son 'Confidencias a medianoche', 'Pijama para dos' y 'No me mandes flores'. Todas ellas comedias románticas dónde dejaban ver lo que era una relación adorable y perfecta para lo que debía ser un matrimonio respetable. Y es que América se empeñó en exportar la inocencia y castidad de Doris Day y Rock Hudson, pero la realidad no fue así y nada tenía que ver con la vida personal de ambos.
El verdadero deseo de Doris Day
Lo cierto es que Doris Day nunca quiso ser estrella de Hollywood. Su verdadero sueño era ser una ama de casa extraordinaria, pero su atracción incontrolable por los hombres difíciles hizo que nunca construyera un hogar idílico.
Se casó a los 16 años con Al Jorden, un trombonista que la humillaba y la golpeaba en público. Los periódicos de la época recuerdan que Doris lució en varias ocasiones orgullosa sus magulladuras. Con 18 años era madre y estaba divorciada de Jorden, quien se suicidaría 25 años después.
Ante un inminente segundo divorcio, Doris Day mantuvo relaciones paralelas con Al Levy, Jack Carson, Steve Cochran y Martin Melcher. Tras una breve relación con el presidente Ronald Reagan, se casó por tercera vez con Melcher, quién la ayudó a convertirse en la mujer preferida de América.
Hasta el día de su muerte, Doris ha sido la estrella más taquillera de la Historia del Cine. Fue ella la que creó el arquetipo de 'la chica de al lado'. Este emblema sería después utilizado por Meg Ryan durante toda su carrera.
Los amantes más conocidos de Doris Day
Los actores que integran su lista de amantes son sin lugar a dudas los artistas más importantes de los años 60.
En ella se pueden encontrar nombres como Cary Grant, Jack Lemmon, James Cagney, Kirk Douglas, Jimmy Stewart y Fran Sinatra, entre otros.
Se trataba de otro tiempo en el que los estudios de Hollywood protegían con gran recelo y eficacia la imagen pública de sus estrellas. Para mantener impecable su imagen, intimidaban y sobornaban.
De esta manera, los trapos más sucios no veían la luz. En la actualidad, Doris Day no habría podido mantener su imagen de mujer perfecta.
Al final de su carrera protagonizó 'The Doris Day Show' que fue un gran éxito televisivo durante cinco temporadas en los años 80. Uno de los especiales del show tuvo gran éxito. En él se pudo ver ya muy demacrado a su antiguo compañero Rock Hudson, homosexual y seropositivo, que pocos meses después fallecería a causa del SIDA. Sin lugar a dudas, esta fue la manera gracias a la cual la sociedad americana tuvo que hacer frente a la imagen falsa que le habían vendido y enfrentarse así a la cara más dura de la enfermedad.