Al menos 15 días sin ningún tipo de energía eléctrica. No funcionará la calefacción ni las neveras o cocinas eléctricas, tampoco habrá Internet ni cajeros bancarios que puedan dispensar efectivo. Así lo ha advertido el Gobierno de Austria a toda su población asegurando que este escenario podría ocurrir en los próximos años.

Por tal motivo, el Gobierno de este país ha destinado los recursos necesarios a fin de concienciar a todos sus habitantes y prepararlos para que sepan qué hacer y estén preparados en caso de presentarse una situación de esta envergadura.

Al respecto, la ministra de Defensa austriaca, Klaudia Tanner, sostuvo en abril de este año que "la cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuándo". Así lo precisó mientras supervisaba varias actividades que buscan crear conciencia en la población sobre "un peligro real, pero subestimado".

Además, a comienzos de octubre Tanner estuvo al frente del lanzamiento de una campaña informativa en medios de comunicación donde se explica "qué hacer cuando todo se detiene", siendo este el slogan del evento que se impulsará durante por lo menos un mes.

Según confirmó a principios de mes, la ministra de Defensa a través de sus redes sociales, también se dispondrán de miles de carteles repartidos por las ciudades austriacas para llevar la información a toda la población.

Advierten de un gran apagón en Europa

Sobre este punto, las autoridades precisaron que el corte de suministro eléctrico que duraría por varios días, no solo tendría lugar en Austria, sino que este catastrófico escenario también se extendería a toda Europa.

De hecho, no sería la primera vez que una situación semejante ocurriera en el viejo continente.

En 1983, al menos 4,5 millones de personas que habitaban en Suecia se vieron afectadas por un gran apagón que duró más de 80 días.

En aquella ocasión, un cortocircuito en un transformador dejó inservible la red eléctrica. Este hecho se registró el 27 de diciembre de ese año y fue el día 25 de marzo de 1984 cuando se restableció el sistema eléctrico y el país pudo retornar a la normalidad.

En Italia también se registró un corte de energía eléctrica cuando a las 3:00 horas del 28 de septiembre del 2003, una línea de alta tensión que suministraba electricidad quedó dañada por varios árboles caídos durante una tormenta.

Por este evento, casi toda la población italiana resultó afectada en el quehacer de sus actividades cotidianas. Incluso, en algunas ciudades el suministro eléctrico no regresó hasta 18 horas después.

Las causas de un posible gran apagón

Aunque las autoridades no han precisado sobre una causa en específico que ocasionaría un gran apagón, han mencionado que un gran corte eléctrico puede deberse a fallos técnicos del sistema, desajustes o sobrecargas por picos de demanda.

Del mismo modo, las autoridades han señalado que las temperaturas muy extremas, como olas de frío y calor, pueden ser determinantes para ocasionar una falla eléctrica que afecte a gran parte del país, o incluso a otros de Europa.

En vista de esta situación, el Gobierno de Austria ya ha empezado a tomar una serie de acciones y medidas para que los ciudadanos de este país sean afectados de la menor manera posible, en caso de presentarse un gran apagón eléctrico en su territorio.

Austria ya está tomando medidas

En el transcurso de al menos 18 meses, el ejército de Austria ha llevado a cabo una serie de eventos, simulacros y actividades que tienen como objetivo agilizar la respuesta y la atención oportuna a toda la población de este país.

Así lo ha explicado recientemente el teniente coronel Pierre Kugelweis, quien expresó que ''en caso de un apagón, la tarea principal de las Fuerzas Armadas es abastecer y apoyar a otras organizaciones de emergencia''.

Del mismo modo, señaló que Austria se prepara para que en 2025 todos sus cuarteles sean autosuficientes. ''A partir de 2025 debería haber cuarteles suficientes en todos los estados federados para garantizar la respuesta del ejército en caso de apagón'', indicó Kugelweis.

Recomendaciones para la población

La ministra Tanner ha llamado a los ciudadanos austriacos a mantenerse abastecidos con agua y comida para varios días. "¿Qué hacer cuando nada funciona, cuando no hay agua ni electricidad?

Un gran apagón tiene enormes consecuencias”, explicó la autoridad mientras mencionaba las medidas recomendadas.

En este sentido, indicó que es necesario contar con suficiente combustible, baterías y otros artefactos de primera necesidad que permitan hacer más llevadero un escenario como el mencionado. Un hornillo portátil de gas, linternas o velas, una radio que funcione con pilas, además de suficiente dinero en efectivo, también son necesarios tener a mano para paliar un evento de este tipo.

Sobre estas recomendaciones, el teniente coronel Pierre Kugelweis dijo que era imprescindible contar con alimentos duraderos, como pasta, arroz y alimentos en conserva, y además, detalló la cantidad de al menos dos litros de agua por persona por cada día.

El funcionario del ejército también expuso que se debe establecer un punto de encuentro entre familiares o amigos, en caso de apagones que duren varios días. Así lo explicó tomando en cuenta que dejarían de funcionar tanto Internet como los teléfonos, y se haría imposible la comunicación inmediata por estas vías.

Predijeron la pandemia

A raíz de la advertencia sobre este posible apagón eléctrico que ocurriría en los próximos años, medios nacionales austriacos han referido que no es la primera vez que el ejército de ese país acierta sobre los detalles de una predicción.

En el año 2017 dieron a conocer que una posible pandemia paralizaría el mundo en la próxima década. Esto finalmente terminó cumpliéndose por la pandemia de la Covid-19 que aún mantiene a las personas en un entorno alejado de lo acostumbrado.

Por tanto, el Ministerio del Interior de este país ya ha empezado a tomar acciones para mitigar posibles actos que perjudicarían la tranquilidad del país, en caso de cumplirse esta advertencia sobre el sistema eléctrico. Tal afirmación la ha hecho el titular de dicha cartera, Karl Nehammer, al afirmar que un apagón sería ''una de las mayores amenazas para un Estado moderno''.

Igualmente, ha explicado que los protocolos diseñados buscan evitar que se aproveche el apagón para saquear establecimientos, como comercios o supermercados, así como también para regular el tráfico en caso de que no funcionen los semáforos.