Boris Johnson ha vivido unas semanas de subidas y bajadas: después de estar muy grave por culpa del Coronavirus, el “premier” ha dado la bienvenida a su hijo pequeño, todo en medio de la crisis del coronavirus que ha golpeado con mucha fuera a Reino Unido. En su primera entrevista tras haber sobrevivido al coronavirus, el político reconoce que su estado fue mucho más grave de lo que Downing Street confirmó a los medios de comunicación del país. Era tan grave la situación que Boris Johnson ha reconocido que todo estaba preparado para anunciar su fallecimiento al más puro estilo “Stalin”.

El primer ministro británico ha sorprendido a sus ciudadanos al revelar, en esta entrevista, que el Gobierno del país había llegado a organizar un plan de contingencia ante su fallecimiento por coronavirus al más puro estilo de Stalin, después de tener que ser ingresado en el centro hospitalario ST. Thomas donde necesitó una gran cantidad de litros de oxígeno para salir adelante. El político ha elegido al periódico “The Sun” para reconocer que su situación fue mucho más grave de lo que se admitió a los medios de comunicación y no ha dudado en dar las gracias los dos médicos que lograron salvarle la vida, Nick Hart y Nick Price.

Como muestra de agradecimiento al equipo médico que le salvó la vida su hijo que acaba de llegar al mundo ha recibido el nombre de Wilfred Lawrie Nicholas.

La primera entrevista llevada a cabo por Johnson ha sido publicada el mismo día que Reino Unido ha publicado su última cifra oficial: 28.131 personas han perdido la vida por culpa del virus y Reino Unido va en camino de convertirse el país europeo con el mayor número de víctimas mortales por culpa de la epidemia que ha arrasado el continente europeo.

El “premier” está recibiendo numerosas críticas por las distracciones realizadas aprovechando el Brexit y por decisiones marcadas por su vida privada que hicieron que Reino Unido reaccionase con mucho retraso en comparación con otros países europeos.

Johnson sí necesitó oxígeno, pero no conectarse a un respirador

El político asegura que el deseo de volver a poner en pie su país, Reino Unido y el nacimiento inminente de su sexto hijo con su pareja Carrie Symonds (la joven le enviaba ecografías a su teléfono) le animaron durante los tres días que permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos con la ayuda de oxígeno, aunque no tuvo que ser conectado a uno de los respiradores como se llegó a publicar.

El político dio positivo el pasado día 26 de marzo y tuvo que estar diez días aislado en el número 11 de la mítica Downing Street. Johnson recuerda perfectamente el momento en que dio positivo y no se podía creer que su salud se deteriorase tan rápido, aunque hoy en día admite que no estaba en buena forma física.