Trump ha anunciado la muerte de Al Bagdadi, uno de los hombres más buscados del planeta por ser el líder del grupo terrorista “Estado Islámico”, tras llevar a cabo una operación militar por parte de los Estados Unidos. Fuerzas especiales del ejército de los Estados Unidos habrían lanzado, a lo largo de la pasada madrugada, un ataque sobre el edificio donde se escondía el líder de Estado Islámico, en la zona noroeste de Siria. En esta ocasión, había orden clara de garantizarse la muerte de Al Bagdadi, después de ser dado por muerto erróneamente en el pasado.

En más de una ocasión, tanto el ejército ruso como el estadounidense había anunciado que habían matado al líder de Estado Islámico de manera equivocada.

Trump ha anunciado que el ejército de Estados Unidos ha acabado con Al Bagdadi

Pero, justo cuando nadie se lo esperaba, Abu Bakr Al Bagdadi, como líder de Estado Islámico, volvía a reaparecer y desmentía a cada una de las informaciones que se publicaban en los medios de comunicación. Llevaba dos años como fugitivo desde que empezara a perder territorio y poder, sobre todo, al empezar a sufrir derrotas en Irak y Siria, que se solía salvar de manera airosa, a veces, otra por los pelos, a los intentos de asesinato por parte de los ejércitos. Pero esto cambió este mismo domingo.

Donald Trump ha anunciado que la noche del domingo, Estados Unidos ha sido capaz de hacer justicia acabando con la vida del mayor terrorista del momento. Abu Bakr Al Bagdadi ha terminado muerto. El terrorista ha perdido la vida en un túnel, acorralado por varios miembros del ejército del Estados Unidos, llorando, gritando y suplicando por su vida.

Eso sí, Donald Trump ha anunciado esta noticia con toda la pompa que se podría imaginar por parte del actual Presidente de los Estados Unidos.

El líder del Estado Islámico se escondía en un lugar controlado por una facción de la antigua Al Qaeda

El actual presidente de los Estados Unidos explicó que la operación tuvo lugar en la zona noroeste de Siria y participaron un total de ocho helicópteros y un número alto de fuerzas especiales del ejército de Estados Unidos.

Al Bagdadi estaría escondido junto a sus dos esposas, varios de sus hijos, y junto a su guardia personal en una casucha localizada en el pueblo de Barisha, situada en la provincia ocupada por los rebeldes sirios de Idleb y que está controlada por la antigua Al Qaeda del país sirio, Hayat Tharir al Sham.

Aunque el líder estaba en su territorio, en realidad, no estaba siendo protegido en ningún caso, ya que, tanto Hayat Tharir al Sham (HTS) como Estado Islámico han sido rivales. El propio líder del HTS ha celebrado la muerte de su enemigo, aunque lamenta que haya sido en manos del ejército de los infieles y no bajo la fuerza de combatientes que siguen la fe verdadera.