El día de ayer, miércoles 15 de agosto, el Tribunal Supremo de Justicia venezolano en el exilio dictó sentencia contra el mandatario Nicolás Maduro Moros. El político venezolano fue acusado por los delitos de corrupción y legitimación de capitales, siendo implicado en uno de los sonados casos de la firma brasileña Odebrecht. El juicio contra Maduro culminó el pasado 2 de agosto. Ahora quedara de parte de los organismos internacionales dar cumplimiento a la sentencia, en vista del secuestro de poderes imperante en Venezuela.

Sentencia desde Bogotá

Desde Bogotá el máximo ente judicial venezolano condenó a Maduro a pagar 18 años más tres meses de cárcel, considerando las circunstancias agravantes del caso y otras consideradas por el órgano judicial. Así lo manifestó Rommel Gil, uno de los magistrados, desde la sede del Congreso de Colombia, lugar donde se ejecutó la audiencia. Agregó que ese tribunal determinó con pruebas fehacientes la culpabilidad del mandatario socialista, por lo cual lo inhabilitó para ejercer cargos públicos durante el periodo que dure su condena.

Adicionalmente, Maduro fue sancionado con una multa por 25 millones de dólares. Luego de finalizado el juicio, considerado como un hecho “historico” por Miguel Angel Martín presidente del poder judicial exiliado, el público presente despidió entre aplausos a los jueces magistrados coreando el grito de “justicia”.

Gil señaló que Maduro deberá cumplir su condena en la Cárcel de Ramo Verde, en el estado Miranda. Este centro militar de reclusión ha servido para mantener en cautividad a varios políticos opositores tales como el líder Leopoldo López y el ex alcalde de San Cristobal, Daniel Ceballos, entre otros civiles y militares que han enfrentado al régimen.

El papel de la exfiscal

El juicio contra Maduro fue promovido por la Ex Fiscal General de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, y tuvo su inicio el 2 de agosto en la ciudad de Bogotá. Durante las siete audiencias realizadas, Ortega Díaz presentó pruebas irrefutables que vinculan a Nicolas Maduro con la cuestionada empresa brasileña.

Según la exfiscal, Maduro siendo canciller durante el mandato del extinto Hugo Chávez, suscribió contratos con la empresa que fueron asignados de forma directa como parte del pago por su apoyo financiero durante la campaña electoral del año 2005.

Asimismo, Maduro es acusado de solicitar a la firma brasilera la cantidad de 50 millones de dólares para financiar su campaña presidencial en el año 2013. En esa oportunidad el presidente condenado recibió 35 millones de dólares de manos de la empresa, a cambio de dar un trato preferencial una vez asumido el mandato.