Desde hace algunos días los nicaragüenses han salido a las calles a demostrar su descontento por las medidas implementadas por el actual mandatario. Esta situación ha traído como consecuencia que el país se paralizara en contra del Presidente Daniel Ortega, dejándole claro al mundo que los ciudadanos de Nicaragua quieren un cambio.
Este jueves se unieron junto al pueblo, los estudiantes, empresarios y distintas organizaciones representados por la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia en una gran marcha que se denominó 'Somos un volcán'.
En las principales calles de Managua y demás regiones miles de nicaragüenses clamaron por la Justicia y la libertad de todas las personas que han sido detenidos y torturados por tener ideas opuestas al actual gobierno.
Según Ana Margarita Vijil, representante del Movimiento Renovador Sandinista, y partidaria de la oposición, la única salida a esta situación es la liberación de los presos políticos. Recordemos que esta activista ha sido desde el 2007 perseguida y acosada por las autoridades del gobierno.
Paro general en Nicaragua
Posteriormente el día viernes se unieron para un paro general, fue realmente sorprendente como todo permanecía en extrema tranquilidad, los ciudadanos se quedaron en sus casas tal cual como si se tratase de un domingo.
Se pudo evidenciar calles solitarias, negocios cerrados, supermercados y centros de distribución de alimentos vacíos. Es importante mencionar que el sector del transporte también se unió a dicho al paro dejando a las personas sin opciones públicas para el traslado.
Casi más del 65% de los ciudadanos exigen la salida de Daniel Ortega del gobierno.
Para nadie es un secreto que las decisiones radicales de Ortega no son aceptadas por los habitantes, si a eso se le suma el hecho de que se utilizan las fuerzas policiales y los paramilitares para reprender sangrientamente a los que no están de acuerdo con las malas políticas implementadas, se tiene como resultado las acciones que actualmente se están tomando.
No es justo que más de 350 personas hayan sido víctimas de este régimen opresor y las diferentes organizaciones nacionales e internacionales no se manifiestan en contra de lo que está ocurriendo a excepción de la organización de los derechos humanos que siempre anda al pendiente de los acontecimientos.
Las calles de Nicaragua se convirtieron en trincheras
Como resultado de los últimos enfrentamientos el gobierno acusó literalmente de terroristas a los manifestantes. Por otra parte, la misma comunidad expresó que en la marcha del jueves existió una represión por parte del gobierno contra la ciudadanía que dejó un saldo negativo de al menos 15 heridos.
Muchos representantes de las comunidades expresaron que las calles de Nicaragua se convirtieron en trincheras pero de propagandas que han inundado las principales vías con la ayuda del gobierno chavista desde Venezuela, país que apoya a Ortega incondicionalmente debido a que siguen las mismas líneas socialista dejadas por el ya fallecido presidente Chávez y que ha desatado una situación insostenible a dicho país.