Hablar de la Venezuela de los años 80 es recordar cuando los venezolanos eran bienvenidos en todos los países del mundo porque ahí dejaban el fruto de su trabajo, cuando disfrutaban de unas merecidas vacaciones a todo dar. Cuando las maletas se iban vacías y llegaban llenas porque el valor del Bolívar era mucho más fuerte que el actual y servía para mucho.

En las Venezuela de los años 80, los jóvenes venezolanos se preocupaban por estudiar para tener un mejor futuro, el cual se veía muy próspero y brillante debido a todas las facilidades que tenían para poder superarse y escalar en la sociedad de acuerdo a sus dones y preparación académica y no por afiliación política.

Los jóvenes de los 80 no pensaban en intervenir en la política ni en hacer una cola para comprar alimentos porque eso había de sobra, ellos se preparaban cada viernes para disfrutar al máximo de un fin de semana de 'rumba' vistiéndose a la última moda y bailando los merengues de la época y los últimos hits de los cantantes estadounidenses como: Bee Gees, Madonna, Queen, Cindy Lauper, Boy George, Village People y muchos más.

En la época de los 80 los conciertos de los venezolanos: Yordano, Ilan Chester, Franco De Vita, Karina, Ricardo Montaner, Frank Quikntero, Kiara y otros en El Teatro Teresa Carreño y las gaitas en el Poliedro, eran la preocupación de los jóvenes venezolanos de la época: ¿Con quién voy, hasta qué hora me van a dejar quedarme?

Eran las preguntas de esos chicos y no se preocupaban por deambular por las calles a altas horas de la noche porque la delincuencia existía pero no estaba descontrolada.

Por eso, 36 años después se busca esa Venezuela que quedó atrás donde los venezolanos eran adecos o copeyanos, magallaneros o caraquistas, grandes o pequeños, negros o blancos y no por eso enemigos ni rivales acérrimos.

En los años 80 los jóvenes venezolanos eran ciudadanos con derechos y deberes, quienes disfrutaban al máximo su vida y no veían en el futuro gris que en el 2016 se vive en Venezuela.