Ana Botín, presidenta del Banco Santander, ha solicitado al Gobierno de Pedro Sánchez que la actividad laboral debería volver a la normalidad lo antes posible. Además, ha instado a que los empleados más jóvenes y los que ya hayan pasado la enfermedad (o sea, que estén inmunizados) vuelvan cuanto antes a sus puestos de trabajo y tendrá que revisar los objetivos de su grupo financiero después de que pase la crisis por el coronavirus.
La propia Ana Botín, a lo largo de la junta de accionistas de la importante entidad, ha señalado que el Gobierno y las empresas deben realizar la planificación juntos de la vuelta al trabajo de estos sectores de la población para que la crisis económica no sea tan dura.
Según la presidenta del Banco Santander, es necesario que España vuelva a la normalidad en un período de tiempo corto
La presidenta del Banco Santander ha considerado que si no se apuesta por volver a la normalidad en un corto período de tiempo, dentro de unas posibilidades reales, el impacto del COVID-19 sobre la economía de España puede ser realmente devastador.
Por otro lado, también considera que el Gobierno debe ofrecer a los hogares y a las empresas la liquidez que necesitan para poder salir de la crisis que se está iniciando. Sin este apoyo por parte del Gobierno ni sin esa deseada liquidez, muchas empresas no van a poder salir adelante tras el coronavirus, según estimaciones de Botín.
Para salir a flote, será muy necesaria la inversión extranjera y local para crear nuevos puestos de trabajo
Por eso, Botín considera que va a ser fundamental la creación de puestos de trabajo e insta al Ejecutivo a que haga todo lo posible para favorecer lo máximo posible la inversión de accionistas extranjeros y también local que facilite la creación de nuevos puestos de trabajo.
En estos momentos, es fundamental atraer la inversión extranjera y el talento a España para poder salir adelante.
Igualmente, la Presidenta del Banco Santander se ha mostrado muy crítica con la gestión que está llevando a cabo por parte de la Unión Europea de la crisis provocada por el coronavirus. Aunque sí ha considerado que Bruselas ha actuado de manera muy rápida para poder hacer frente a la emergencia sanitaria, aunque le ha pedido una mayor implicación desde un punto de vista económico.
Sus palabras no han ido destinadas a un responsable en concreto, pero no han dejado lugar a ninguna duda: "Estamos viviendo el momento en el que Europa debe liderar la lucha contra el COVID-19 y mostrar su faceta más solidaria. Sin solidaridad no existe Unión Europea". Además, la polémica decisión de suspender el dividendo asegura que deben entender que "lo importante, ahora mismo, es una respuesta conjunta contra el COVID-19".