El famoso indicador PMI ha marcado el peor dato desde el mes de octubre del año 2012. O sea, desde hace siete años. El sentimiento económico de las fábricas pertenecientes a la zona euro es que tienen claro que estamos a punto de entrar en una nueva crisis y lo peor aún está por iniciarse.

Las fábricas que están en la zona euro están viviendo una serie de consecuencias negativas que les preocupan, y mucho, para valorar su futuro: la ralentización de la economía a nivel mundial, la guerra en el sector comercial, la caídas de los intercambios a nivel internacional y otras numerosas dudas por culpa de la posibilidad de que tenga lugar un Brexit duro.

Los datos y estadísticas revelan que las fábricas se encuentran con más dificultades que esperanzas para el presente

El deterioro de los resultados empezó a ser preocupante a partir de este mes de septiembre, cuando el PMI (índice de gerentes de compras) empezó a bajar. Este indicador se utiliza para valorar el estado y el futuro de las fábricas que están en la zona euro. Pues bien, en el mes de septiembre cayó a los valores de 45,7 puntos desde los 47 en tan solo un mes, por lo que sigue marcado que estamos ante una recesión aparente, después de caer desde los 50 puntos.

De esta manera, se han llegado a los peores datos desde el mes de octubre del año 2012. Con esta nueva caída, aumenta a ocho meses, de manera consecutiva, la contracción en el mundo de las manufacturas.

Pero los expertos del IHS Markit, el equipo que se encarga de llevar a cabo el registro de datos, consideran que "los peores datos están a punto de llegar".

Las cifras son claras: las empresas de la zona euro tendrán que prepararse ante la crisis que está a punto de iniciarse

Sin duda, la situación es de un empeoramiento de las condiciones en el mundo de las manufacturas de la región, que se verán afectadas por la presente guerra en el mundo del comercio y las dudas por culpa del Brexit y que ha sido impulsado por el rápido deterioro, por ejemplo, en el caso de Alemania, cuyo valor del PMI ha llegado a los mínimos del mes de junio del año 2009.

Francia, la segunda economía del bloque, logró superar el valor de 50 puntos por una décima, mientras que España e Italia, cuarta y tercera de manera respectiva, siguen en recesión.

Sin duda, cifras muy preocupantes, ya que el continente todavía no se ha recuperado del crack que empezó en el año 2008 y terminó en 2012 y, hoy en día, se espera que esta nueva crisis sea aún peor.

Esta preocupante caída del índice del PMI ha sido provocada por la mayor caída de los pedidos nuevos desde el pasado mes de octubre del año 2012, con grandes caídas en los países estudiados, excepto en Países Bajos o en Grecia, ante la demanda a nivel nacional e internacional debilitada por la falta de interés comercial.