La venta de una propiedad de Cocheras ubicada en la ciudad de Madrid está por un monto muy, pero muy por debajo de su verdadero Valor Catastral. El lunes la EMT, juntó a la opinión de varios grupos de oposición en contra, han decidido aprobar la enajenación de las antiguas cocheras de Carabanchel Alto (Deposito Buenavista), las cuales llevan casi una década sin un uso específico.

Precio menor al 50%

La queja de la mayoría de los grupos de oposición del Congreso no es por la venta del terreno, sino por el precio. Según el último análisis catastral registrado, la propiedad antes mencionada ostenta un valor de aproximadamente 49 millones de euros, pero la EMT decidió ponerle un precio de unos 16 millones de euros, lo que representa una diferencia de casi el 70% de su precio real.

Esto representa pérdidas para la nación, porque el dinero procedente de la venta de este lote, va a dar a las arcas españolas.

Lo que más llama la atención de la venta de estos terrenos es la prisa con la venta que desea el EMT, debido a que, literalmente, no necesita dinero en estos momentos. Esto se debe a que hace un tiempo, en pleno Palacio de Cibeles, el Gobierno Municipal contempló una ampliación del capital de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid en 200 millones de euros, suficiente para cubrir todos los proyectos en cuanto a vialidad e infraestructura transportista.

Venta tipo subasta

Con esta medida, los únicos beneficiados serían los empresarios e inversionistas que deseen adquirir esta propiedad.

El motivo del rechazó de la oposición a la venta del terreno se debe a tres razones fundamentales:

  • La competencia del organismo para tomar la decisión de la venta, debido a que debería ser una comisión delegada, y no el consejo de administración.
  • Dudas respecto a la titularidad del terreno.
  • El precio de venta, el cual es un valor fijado por tasación, que nada tiene que ver con su valor catastral.

No necesariamente este debe de ser su valor de venta, debido a que el método de venta será tipo subasta, lo que quiere decir, que el precio al que se ofrece la propiedad, no sería igual a su precio final de venta.

Esta subasta ha atraído a diferentes tipos de inversionistas, los cuales pujaran para ver quién será el acreedor de este terreno, por lo que, su precio final de venta podría llegar inclusive a los 30 o 35 millones de euros, pero de igual manera, su valor sigue estando por debajo de su precio catastral.