Según se ha podido leer en “Football Leaks”, el capitán del Real Madrid, Sergio Ramos, ha tenido dos episodios problemáticos con los controles antidopaje. Según una filtración que ha llegado a “Football Leaks”, en la prueba posterior a la final de la Champions League que se celebró en la ciudad de Cardiff: en dicha prueba se habría encontrado cortisona. Meses después, tuvo lugar un segundo episodio: el jugador andaluz no siguió las instrucciones que debía seguir para hacer frente a otro test.
Dos conflictos en pocos meses han sido destapados
La “caja de Pandora” de las supuestas infracciones cometidas por Sergio Ramos fue abierta por Football Leaks.
Así, en Cardiff, tras la final de la Champions League, el jugador dio positivo en arezametasona (un preparado de cortisona que aparece en la lista de sustancias prohibidas por la Agencia Mundial Antidopaje) a causa de sus efectos antiinflamatorios y analgésicos; sólo podría ser suministrado previo informe por parte del responsable médico del equipo.
En ese momento, el futbolista responsabilizó de todo al médico del club blanco, que habría tomado la decisión de infiltrarle dicha sustancia en el hombro izquierdo y en la rodilla del mismo lado del cuerpo, para poder paliar unas dolencias crónicas que venía arrastrando. El médico confesó haberse olvidado, ya que, tras la final, habían recibido numerosas visitas en el vestuario, como las del rey Juan Carlos I o del entonces presidente del gobierno, Mariano Rajoy.
Se decidió cerrar el caso por parte de la UEFA, pero advirtiendo al club
Pero, el segundo incidente del que se hizo eco “Der Spiegel” tuvo lugar el pasado 15 de abril, tras el encuentro de liga entre el Real Madrid y el Málaga, que ganó el equipo andaluz, 1-2.
El jugador decidió pegarse una ducha antes de pasar el control, algo que está totalmente prohibido, donde el jugador no puede separarse de la persona encargada de recoger las muestras para realizar el control.
La Agencia Española de Protección en el Deporte ya ha salido en defensa del jugador, asegurando que no incumplió las reglas antidopaje.
No es la primera vez que el Real Madrid tiene problemas con la AMA: antes de la final en Cardiff varios jugadores, entre ellos, Cristiano Ronaldo y Kroos, no quisieron facilitar el trabajo de los miembros de la Agencia y fueron los propios médicos del Real Madrid los que se encargaron de la extracción de sangre, cuando dicho control solo puede ser llevado a cabo por médicos de la UEFA.