El francés Ousmane Dembelé, se ha convertido en un fijo para ser sustituido. Está situación es complicada porque el jugador no se lo merece, esto es lo que pasa cuando tienes que gestionar un grupo de estrellas en un vestuario con muchos egos. El francés ha empezado esta temporada a un nivel espectacular y por ahora es uno de los futbolistas azulgrana más en forma.
Está apareciendo en partidos importantes dejando buenos detalles de calidad y golazos, como el que metió en Champions League la jornada pasada. En los sietes partidos oficiales disputados que llevamos esta temporada solo ha termina un encuentro, ha sido sustituido en seis partidos esto lo convierte en un cambio casi seguro por partido, algo que muchos no entienden.
Sigue en su etapa de evolución
Los aficionados del Barça quieren ver al Dembélé del Borussia, lo que hasta ahora hemos visto es lo que se acerca más al jugador vertical y con pegada que vimos en Alemania. En la jornada pasada tuvo que pagar por la expulsión de Lenglet, fue el primer cambio sin haber hecho méritos para salir del encuentro y tuvo que abandonar el partido en el segundo tiempo, todos sabemos que el primer año del galo fue muy difícil ya que el jugador vino para hacer el reemplazo de Neymar, asumiendo el hueco que la estrella de Brasil hubiese dejado tras su marcha hacia el París Saint Germain.
El francés se lesionó apenas empezar la temporada y se perdió muchos partidos importantes, su proceso de recuperación fue lento para que no hubiese algún problema por llevarlo rápido, el futbolista cuando volvió a los terrenos de juego se vio relegado a un segundo plano ya que no contaba mucho para su entrenador, por su falta de ritmo en la competición futbolista viajó con la selección Francesa, pero fue suplente en el mundial ya que le ganaron la partida algunos jugadores como kylian y Giroud que llevaban una temporada excelente.
Tiene grandes jugadores a su lado
Su estado de forma actual es bueno y es por eso que quiere volver a ser titular en el equipo de Francia y poder ser importante con su selección y jugar más es un desafío que se ha propuesto. En el Barcelona el jugador es titular indiscutible porque aporta otro tipo de juego, más velocidad con su toque de habilidad y puede cambiar un partido importante, teniendo compañeros que lo ayudan a crecer y mejorar como son Messi y Luís Suárez debe de sentirse protegido e importante para demostrar que es un jugador de talla mundial que puede seguir al nivel que nos está demostrando en lo que va de temporada.
