La Copa Mundial de Rusia 2018 está por terminar. Se disputó un partido entre las selecciones de Bélgica e Inglaterra, en el cual se decidiría el tercer lugar de dicho torneo. El encuentro se llevó a cabo en el Zenit Arena ubicado en San Petersburgo. El árbitro designado por FIFA para dirigir dicho cotejo fue el colegiado iraní Alireza Faghani. La victoria se la llevó la selección Belga por marcador de 2 a 0.

Muchos expertos del Fútbol y medios de comunicación han tomado el partido por el tercer puesto como un encuentro innecesario e incómodo para las delegaciones.

Sin embargo, ambas selecciones se tomaron muy en serio dicho compromiso. Ambas escuadras salieron al terreno de juego con el ánimo por las nubes y con muchas ganas de llevarse las medallas a su país, con el fin de enorgullecer más a sus aficionados.

Estrategias planteadas por ambos entrenadores

El entrenador de Inglaterra, Gareth Southgate, quien es conocido por su dedicado trabajo en la formación y gestión de equipos juveniles en Inglaterra, utilizó la misma formación basada en un 3-5-2, con la cual disputó los 6 partidos anteriores de dicho torneo. Sin embargo, hubo una serie de cambios en cuanto a los jugadores alineados; tales como las titularidades de Eric Dier y Fabian Delph por Jordan Henderson y Jesse Lingard.

Por su parte el entrenador de Bélgica, Roberto Martínez, salió con su once de gala, solo hizo dos sustituciones con respecto al partido pasado que fueron la inclusión de Tiellemans y Meunier por Dembelé y Fellaini. La formación usada fue un ultraofensivo y bien trabajado 3-4-3, diseñado especialmente para aprovechar la velocidad en los contraataques y crear ofensivas con gran cantidad de elementos.

Estadísticas y pormenores del encuentro

Durante los 90 minutos, la posesión del balón fue dominada por Inglaterra en un 57%. Los ingleses lograron completar 641 pases mientras que Bélgica solo pudo concretar 450. Crearon prácticamente la misma cantidad de ocasiones en ofensiva; Bélgica disparó 5 remates adentro del arco, uno más que los 4 realizados por Inglaterra.

Fue un partido bastante limpio y solo se sacaron tres tarjetas amarillas.

Bélgica dominó el encuentro durante los primeros minutos creando ocasiones de gol constantemente. El primer gol para los belgas llegó en el minuto 4 del primer tiempo; el carrilero izquierdo Chadli se escapa por la banda izquierda rápidamente y envía un centro al área que logra rematar contundentemente Meunier. Inglaterra tuvo una ocasión clara en el minuto 23 donde Sterling baja un balón en el área y se lo pasa a Kane, quien remata desviado por un costado.

El 2 a 0 definitivo llegó en el minuto 82. Kevin De Bruyne se escapa por el medio del campo y logra colocar un pase en profundidad que recibe Eden Hazard en el área.

El capitán belga logra conducir el balón y perfilarse para mandan un disparo rastrero de pierna derecha que logra vencer al guardameta Pickford. El encuentro terminó con la victoria para Bélgica con un marcador de 2 a 0, con dicho resultado se quedaron con el tercer puesto de Rusia 2018.