Después de que su partido no terminó de la mejor manera contra Suiza (igualado a un gol), la selección de Tite tuvo que revisar su estrategia contra Serbia, su último oponente de la fase de grupos. Neymar y sus compañeros han asegurado su lugar en los octavos de final, lo que les da derecho a jugar contra México, el lunes 2 de julio. Cuatro años después de su debacle en casa, los cinco veces campeones del mundo harán todo lo posible para llegar más lejos en esta competencia en Rusia.
Brasil, sin presión, alcanza los octavos de final
Las lágrimas de Neymar hablaban mucho sobre su estado psicológico.
El jugador de 27 años habló en su cuenta de Instagram de todo el dolor que ha experimentado desde el hundimiento de Belo Horizonte, un partido al que no pudo asistir en la pasada Copa del Mundo.
Para su segunda participación en un Mundial, Neymar acompañó a su equipo a una buena victoria contra Serbia. Los serbios, que también tuvieron la oportunidad de calificar, no podrán continuar su curso.
Paulinho se erigió como una de las figuras del partido al anotar un gol. El jugador del FC Barcelona ha logrado el mayor esfuerzo en este partido, y permitirá que otros miembros del grupo sigan adelante. El descanso llegaría a los veinte minutos antes del final del partido, con una acción decisiva de Thiago Silva.
Después de dos juegos no necesariamente convincentes de la selección de Brasil, los hombres de Tite han logrado esta vez hacer el trabajo sin demasiadas complicaciones.
Un duelo sudamericano en octavos
El próximo partido será contra México. Su enemigo centroamericano, que ha cometido la hazaña de vencer a Alemania un gol por cero en el primer juego y que le ganó a Corea del Sur dos goles a uno, está en buena forma para este Mundial.
Estos hombres, liderados por Juan Carlos Osorio, ¿pueden crear la hazaña contra un Brasil reconstruido, pero privado de su defensor estrella Marcelo? El Tri tiene un gran desafío frente a esta selección, pero pueden tomar la iniciativa.
Primero en su grupo, los brasileños tienen mucho trabajo por hacer para devolver el corazón a todos sus seguidores.
Desde 2016 y la llegada de Tite a la cabeza del club, la selección elige un juego mucho más insistente hacia el objetivo propuesto contra sus oponentes. Siguen siendo obviamente uno de los equipos favoritos al título, en el mismo nivel que España, Portugal, Argentina o Bélgica. Este equipo esta listo para hacer historia.